Huermur ha puesto en conocimiento de esta Comisión un amplio informe del estado de conservación de los castillos declarados Bien de Interés Cultural en Murcia, remitiendo un dossier con fichas, fotografías, e informaciones sobre su estado, protección y afecciones más graves en este patrimonio histórico
La Comisión de la Asamblea Regional ha solicitado información detallada a la Consejería de Turismo y Cultura sobre estas edificaciones históricas, así como sobre las partidas presupuestarias que la Consejería dedica a estos bienes
Huermur también ha solicitado que se emprendan las iniciativas adecuadas desde la Asamblea Regional para crear una figura, programa o acción regional de puesta en valor, recuperación, rehabilitación y accesibilidad del conjunto de las once edificaciones que forman el sistema defensivo de época medieval
La Asociación para la Conservación de la Huerta y el Patrimonio de Murcia (Huermur) ha logrado que la Comisión de Peticiones y Defensa del Ciudadano de la Asamblea Regional inicie un investigación por el mal estado de conservación de los once castillos medievales de Murcia y su huerta, entre los que podemos encontrar el Castillo de Monteagudo, el Castillejo, el Castillo de la Luz, los castillos del Puerto de la Cadena, la Asomada, Larache, Cabezo de Torres, el Castillo de Los Garres, Tabala o el del Cabezo del Moro en la pedanía de Cañadas de San Pedro, por ejemplo. También se ha informado sobre el mal estado de las dos grandes albercas o albercones de Monteagudo y Larache, fuertemente ligadas a sus castillos en la huerta de Murcia.
Huermur remarca que todos estos castillos y edificaciones ostentan la máxima categoría de protección que otorga la Ley de Patrimonio Cultural, al ser considerados como bienes de interés cultural (BIC), por lo que las obligaciones de conservación son máximas y obligatorias por normativa tanto local, como regional y estatal. Pero en todos estos casos, señalan desde Huermur, no se estarían cumpliendo los mandatos que la legislación establece para su efectiva conservación y protección, tanto de los castillos en sí, como en sus correspondientes entornos de protección BIC.
En la petición remitida a la Comisión, Huermur envió cuantiosa documentación de interés, así como un completo dossier del estado actual de cada una de las once edificaciones defensivas, solicitando que se lleven a cabo las actuaciones y diligencias necesarias encaminadas a instar a que el Gobierno Regional, sus consejerías pertinentes y sus responsables lleven a cabo de forma urgente y sin más dilaciones las actuaciones oportunas para evitar la ruina y la degradación del conjunto de los once castillos y edificaciones BIC, dado el preocupante estado de algunas de ellas, y se impida cualquier daño, deterioro o menoscabo de estos monumentos protegidos, y de sus entornos de protección.
En el mismo sentido, Huermur ha instado a que se emprendan las iniciativas adecuadas desde la Asamblea Regional para crear una figura, programa y/o acción regional de puesta en valor, recuperación, rehabilitación y accesibilidad del conjunto de las once edificaciones que forman el sistema defensivo de época medieval, y cuyos valores quedan más que demostrados al ser todos y cada uno de ellos BIC.
En línea con lo anterior, el Presidente de Huermur, Sergio Pacheco, se pregunta cómo ha sido posible que este rico patrimonio protegido de todos los murcianos y que se configura como un testigo innegable del pasado de nuestra tierra, haya llegado a la situación límite de colapso en la que se encuentra, con numerosas construcciones plagadas de maleza, pintadas, grietas, derrumbes, basuras, y un largo etcétera, que además de suponer una presunta vulneración de la legislación vigente en materia de patrimonio cultural, supone una mala imagen para el turismo que nos visita.
Huermur añade además, que el estado en el que se encuentra este patrimonio medieval, hace que nuestra Región esté perdiendo una oportunidad única de poner en valor estos bienes, y crear así un motor económico, turístico y social de innegable valor, y que supondría un antes y un después en la triste historia de la conservación del patrimonio histórico y cultural de la huerta de Murcia. Huermur pone como ejemplo a municipios de esta propia Región, como Cartagena, donde han demostrado que el cambio hacia un modelo de gestión patrimonial que esté realmente dispuesto a poner en valor la gran cantidad de patrimonio que tenemos, puede incidir de forma muy significativa y positiva en el sector económico, turístico y social de la Región de Murcia, y en cada municipio.
Por último, Huermur ha publicado en su web un mapa interactivo con las ubicaciones de las once edificaciones defensivas, fotografías y un resumen de su estado de conservación, protección y medidas urgentes a llevar a cabo, así como una ficha detallada de cada uno de los castillos murcianos.