Óscar Urralburu, portavoz parlamentario de Podemos, se ha reunido este jueves en la Asamblea Regional con representantes de la Asociación de Padres del Colegio, de la Junta Vecinal y de la Asociación de Vecinos. Tras el encuentro, ha señalado que "hace falta que tanto el Ayuntamiento de Cartagena, como el Gobierno Regional y el Ministerio de Medio Ambiente se impliquen de modo coordinado para diseñar las medidas que permitan resolver una situación que está generando graves problemas de salud en la población, especialmente entre los menores, que juegan en sus colegios en espacios donde hay metales pesados".

Urralburu ha explicado que los representantes de los padres y madres del colegio le han trasladado la "urgente necesidad de que antes del mes de septiembre se tomen las primeras medidas para evitar que los niños sigan el próximo curso en contacto con agentes contaminantes, especialmente en el patio de recreo en el que se depositan partículas y sedimentos con alto contenido de metales tóxicos como plomo, zinz y cadmio provenientes de la Sierra Minera". Además, Podemos presentará una iniciativa para que Educación comience a plantearse la construcción de un nuevo colegio en la zona para garantizar "condiciones dignas y de salubridad para los niños y niñas del Llano".

En este sentido, portavoz parlamentario de Podemos ha advertido de que es responsabilidad de la Consejera de Educación, el abordar medidas cautelares de urgencia, no solamente para el Colegio Público del Llano, sino para todos los centros escolares de la Sierra Minera, para "la protección de los niños de la zona ante la exposición a materiales contaminantes, máxime cuando se trata de una población vulnerable muy expuesta".

Entre las mismas, se ha hecho referencia a una propuesta de la Universidad Politécnica de Cartagena que recoge iniciativas de intervención directa e inmediata en el colegio para retirar los sedimentos del patio de la Escuela Infantil, la impermeabilización y relleno con materiales inertes del mismo o quitar sedimentos del campo de fútbol, así como la construcción de un pabellón deportivo o poner en funcionamiento una valla protectora que impida la entrada de partículas en suspensión desde una vieja balsa minera en las inmediaciones del colegio". Sin olvidar, ha dicho Urralburu, "hacer cierres herméticos en las ventanas de las aulas para impedir la entrada de partículas e instalación de aire acondicionado, y la canalización de las aguas de escorrentía para que no atraviesen el colegio".