El diputado del Grupo Parlamentario Socialista Emilio Ivars ha preguntado esta tarde al consejero de Presidencia Pedro Rivera sobre la utilización de aeronaves de los servicios de emergencia "para hacer unas vueltas turísticas, por personal ajeno a dichos servicios".
Los hechos a los que se refiere el diputado socialista ocurrieron en abril del pasado año, cuando el ex presidente regional y diputado del Grupo Parlamentario Socialista Pedro Antonio Sánchez hizo uso junto a concejales y algunos de sus hijos e hijas de un helicóptero del 112, durante un evento que tuvo lugar en Puerto Lumbreras.
Ivars ha pedido explicaciones al consejero sobre quién autorizó ese vuelo, quién autorizó que se subieran esas personas y los menores, por qué unas personas sí y otras no, si le parece normal la utilización de medios públicos para fines y beneficio privado, entre otras preguntas.
"No estamos haciendo demagogia, sabemos lo costoso que es un vuelo en helicóptero y como beneficio privado que es, consideramos que quien quiera volar debe costeárselo de su bolsillo y no con dinero público".
El diputado socialista también ha preguntado al consejero por los partes de vuelo de ese día, por la autorización para que esas personas subieran y también por el documento con el visto bueno del director general de Seguridad y Emergencias.
Ivars ha reclamado responsabilidades políticas al consejero sobre este suceso, "aunque el consejero puede sorprendernos y decir que los responsables ya no están en la Consejería".
Asimismo, el diputado socialista ha apelado a la ética pública y ha pedido mayor empatía de los cargos políticos con los problemas y situación de la ciudadanía.
"La ética pública va más allá del cumplimiento de la legalidad; porque podrá ser legal o no que en una aeronave de los servicios de emergencias suba personal ajeno, pero no es una conducta ejemplar de cara a los ciudadanos. Hay que demostrar que la ética está por encima de cualquier cosa y más en este caso".
Añadió que el consejero ha perdido una oportunidad para lamentar lo ocurrido y decirle a toda la ciudadanía que no va a volver a suceder y anunciar qué medidas va a poner en marcha para evitarlo.
"El consejero como responsable político de la cosa pública y de los dineros públicos de su Consejería debería exigir que quienes se aprovechen de lo público reviertan en las arcas públicas el coste estimado de la utilización de este servicio turístico, a la sazón, servicio público regalado", concluyó.