Se intervinieron 2 furgonetas con las que realizaban los traslados de los trabajadores a las fincas; así como documentación relacionada con los hechos investigados

Agentes de la Policía Nacional han detenido a doce personas como presuntos autores de los delitos de favorecimiento de la inmigración ilegal, usurpación del estado civil, pertenencia a organización/grupo criminal y de un delito contra los derechos de los trabajadores, al utilizar a personas extranjeras en situación irregular para trabajar en explotaciones agrícolas. Así mismo estos trabajadores eran trasladados, en furgonetas, por los encargados de la empresa agrícola, carentes de habilitación para el transporte de trabajadores.

La investigación se inició a primeros de año, cuando la Unidad contra Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documentales (UCRIF) de la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia, tuvo conocimiento de la explotación laboral por parte de una empresa agrícola, al igual que el traslado continuo de trabajadores a fincas para la recolección sin las habilitaciones pertinentes para ello.

Fruto de esta investigación los agentes comprobaron que los trabajadores, en su gran mayoría, se encontraban en situación irregular, carentes de contrato de trabajo y eran instados por los encargados a que aportaran datos falsos a los agentes policiales con el fin de dificultar su identificación o que usurparan la identidad de otros trabajadores, en situación regular, en caso de ser inspeccionados. Extremo éste que sucedió con alguno de los trabajadores en el momento de la operación que se llevó a cabo tras esta investigación.

En el operativo policial llevado a cabo se procedió a la detención de, por una parte, los responsables, encargados y jefes de cuadrilla, entre los que se encontrarían los que hacía labores de "furgoneteros" y por otra parte los trabajadores en situación irregular que en el momento de la detención bien aportaron datos falsos para dificultar la identificación o bien usurparon la identidad de trabajadores en situación regular.

En el transcurso del operativo se pudo constatar que la empresa no cumplía con las condiciones laborales o sociales prescritas en las disposiciones legales aplicables, imponiendo condiciones tales que el salario no se fijaba por horas trabajadas sino por caja recogida o día trabajado; que los trabajadores debía pagar por los gastos de desplazamiento, así como sufragarse ellos el material de trabajo. Como remate había dos tipos de trabajadores los "legales" y los "ilegales"; aplicando, por parte de los responsables de la empresa, un trato diferencial hacia ellos tanto de condiciones de trabajo como de pago por trabajo realizado.

Los detenidos son todos ellos varones de diferentes nacionalidades, española, marroquí, ucraniana y ecuatoriana y de edades comprendidas entre los 20 y 62 años de edad.