Se va a aumentar la estabilidad de la vía con la reconstrucción del firme, mejorar el drenaje y la visibilidad con la limpieza de cunetas y renovar la señalización y las barreras de protección

El consejero de Fomento e Infraestructuras, Pedro Rivera, anunció hoy que este mes comenzarán las obras de reparación y rehabilitación del firme de la carretera RM-C8, que une Totana con su pedanía de Viñas-Carivete y es el principal acceso al yacimiento arqueológico de La Bastida.

El consejero Pedro Rivera, acompañado por el alcalde de Totana, Juan José Cánovas, realizó un recorrido por la vía e informó que hoy se ha firmado el contrato con la empresa adjudicataria de la actuación, Dragados S.A., por un importe total de 544.205 euros y un plazo de ejecución de cinco meses.

Rivera destacó que se trata de "una carretera fundamental para las comunicaciones de Totana, los núcleos de población y los agricultores del municipio", ya que, según señaló, "su principal función es facilitar el acceso a las viviendas y fincas agrícolas situadas a ambos lados de la vía, que acumula un tráfico de 60.000 vehículos al año".

"Es una infraestructura que, además, impulsa el turismo y la llegada de numerosos visitantes al yacimiento arqueológico de La Bastida, uno de los más importantes de la prehistoria europea, sobre todo de la Edad de Bronce, periodo clave para la sociedad con el desarrollo de la metalurgia de este metal", señaló el responsable autonómico.

La actuación permitirá mejorar la seguridad vial de Totana y la movilidad con los núcleos de población próximos, como Viñas, Anchurica y Carivete, gracias al reasfaltado de la carretera que tiene una longitud de ocho kilómetros y hasta 5,5 metros de ancho.

Las obras consistirán en la regulación de la rasante de pavimento para aumentar la estabilidad de la carretera y reconstrucción del firme en toda la carretera, la limpieza de cunetas para mejorar la visibilidad y la capacidad de desagüe de la carretera.

Además, se entubará el canal de riego existente, situado junto a la calzada de la carretera, y se construirán siete arquetas de hormigón para la recogida del agua de lluvia que cae sobre la vía y limpieza y registro de canal entubado.

También, se sustituirán los muros de contención de tierras o taludes de desmonte por otros de hormigón que se adecuarán a las necesidades de la carretera, se revestirán las cunetas y bermas con hormigón y se renovarán la señalización y las barreras de protección de la vía.