La candidata de Unidos Podemos al Congreso Magdalena Martínez Bode ha dicho hoy en Mula que el acuerdo de libre comercio e inversiones entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, conocido como TTIP, supone un "ataque" contra los derechos de las personas no solo en el ámbito alimentario, sino también en el laboral y en el de la salud.
Para Martínez Bode, el TTIP es "una forma de que las multinacionales pasen a mandar en este país, con tribunales independientes para poder imponer en la legislación lo que quieren", y tendrá especiales consecuencias en la la situación socioeconómica de la Región de Murcia, al intervenir de forma directa en los procesos de producción.
En su opinión, los efectos también se notarán en lo referente a los salarios de los trabajadores y las trabajadoras, y en sus condiciones de vida. A esta situación, ha sumado la apuesta por la fractura hidráulica, el fracking, "que destroza nuestro medio natural".
"Esto va a pasar si no lo paramos el próximo 26 de junio", ha apostillado la candidata.
Por su parte, el cabeza de lista al Senado por la coalición, José Daniel Espejo, ha lamentado la situación de "desigualdad histórica" que sufre la comarca del Noroeste-Río Mula en materia de infraestructuras.
"No tiene que volver a suceder el peaje a la sombra con que se ha financiado la autovía del Noroeste y la doble imposición que ha obligado a los vecinos de esta comarca a pagar dos veces por una infraestructura tan necesaria: una, a través de sus impuestos, y otra, por el canon que está cobrando el Gobierno Regional".
El candidato ha sostenido que la política de infraestructuras del PP para la Región de Murcia se caracteriza por "negociaciones sospechosas, adjudicaciones privilegiadas a Sacyr, como en el caso de esta autovía, o a la empresa de Florentino Pérez en el caso de la desaladora".
Por ello, ha defendido un cambio de modelo de desarrollo de la Región que ayude a recuperar la economía de esta Comunidad "y exponer un futuro para todos los murcianos y las murcianas".