La consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente ha recibido al presidente de la Asociación de Productores y Comercializadores de Melón de Torre Pacheco
La consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá, recibió esta mañana al presidente de la Asociación de Productores y Comercializadores de Melón de Torre Pacheco, Juan Peñalver, para felicitarle por la inscripción del Melón de Torre Pacheco-Murcia en el Registro Comunitario de Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas (DOOR) de la Unión Europea.
El ámbito de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Melón de Torre Pacheco-Murcia comprende una superficie de alrededor de 900 hectáreas, con una producción potencial en torno a los 18.000.000 kilos anuales, en la que están implicadas ocho empresas. Las especificaciones del producto, de la variedad Piel de Sapo, se deben a una calidad superior que se basa en un alto grado de dulzor unido a una firmeza en la pulpa que no es habitual en la madurez total del producto, lo que le da una textura y un sabor especiales.
Martínez-Cachá destacó hoy que "el reconocimiento se ha conseguido tras dos años de intenso trabajo en los que la Asociación ha estado apoyada en todo momento por la Consejería". Además, incidió en "la firme apuesta del Gobierno regional por la promoción de los productos murcianos que son muy apreciados por los consumidores por su calidad".
La asociación que preside Juan Peñalver presentó su solicitud a la Comunidad Autónoma en 2013. La Consejería emitió informe favorable en diciembre de 2013 y se envió al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que lo remitió a Bruselas en junio de 2014. En julio de 2014 se publico en el BOE la orden de protección nacional transitoria. Finalmente, la Comisión Europea ha publicado mediante un reglamento la inscripción de Melón de Torre Pacheco-Murcia como IGP.
El sistema de indicaciones geográficas tiene por objeto proteger denominaciones que identifican a productos agroalimentarios como originarios de un territorio al que pueden atribuirse principalmente la calidad, reputación y otras características. Estas denominaciones se consideran derechos de propiedad industrial.
Los productos con una IGP poseen alguna cualidad determinada que se atribuye a un origen geográfico y cuya producción, transformación o elaboración se realiza en la zona geográfica delimitada de la que también toma su nombre. La única diferencia con una Denominación de Origen Protegida es que alguna de las manipulaciones finales como el envasado pueden realizarse fuera de la zona de producción.