Abarán

La Consejería de Fomento pone en servicio una nueva variante en Abarán para eliminar las curvas que rodean el Cabezo del Judío

La nueva infraestructura, con un presupuesto de 260.000 euros, es una alternativa más rápida y segura para los más de mil vehículos que diariamente transitan por la carretera

El consejero de Fomento e Infraestructuras, Francisco Bernabé, acompañado por el alcalde de Abarán, Jesús Molina, puso hoy en servicio una nueva variante en la carretera RM-514, que comunica las localidades de Abarán y Blanca por la margen izquierda del río Segura, y que permite eliminar las curvas que rodean el Cabezo del Judío.

La nueva infraestructura, de 314 metros de longitud, "es una alternativa más rápida y segura para los más de 1.000 vehículos que diariamente transitan por la carretera, especialmente los vehículos de gran porte, como camiones y autobuses, que tenían dificultades para el tránsito".

Con esta actuación, explicó Bernabé, "los vehículos evitan su paso por un trazado muy sinuoso, con curvas de radio pequeño que aumentan su dificultad al discurrir junto a un peligroso terraplén".

El consejero destacó que la construcción de la variante, con un presupuesto de 260.000 euros, "conllevó la ejecución de un importante desmonte en roca para poder hacer así el nuevo trazado rectilíneo de la carretera".

Su recorrido da cabida a dos carriles de circulación y arcenes de 0,20 metros, con un firme de 15 centímetros de aglomerado asfáltico en caliente sobre 20 centímetros de zahorra.

La actuación también incluyó la ejecución de una obra de drenaje formada por un caño de 800 milímetros, así como su correspondiente señalización y balizamiento.

Noticias de Abarán

Atropelló a la víctima con un turismo a gran velocidad, causándole lesiones de consideración

XVII Carrera Popular Ruta de las Norias Abarán (Puntuable Running Challenge 2024)

La actuación permite mejorar el sistema de filtrado por lecho de arena y cumplir los estándares de calidad del nuevo Reglamento de reutilización de aguas depuradas

El dispositivo de coordinación, vigilancia y extinción moviliza a diario a más de 450 personas entre el 1 de junio y el 30 de septiembre para actuar con la máxima eficacia