La sequía ha producido ya pérdidas por valor de 85 millones de euros, cifra que puede aumentar si persiste la situación de escasez de lluvias

El presidente de la Comunidad, Alberto Garre, anunció hoy que la Unión Europea adelantará al mes de octubre o noviembre ayudas para paliar los efectos negativos de la sequía en la Región de Murcia, y aseguró, tras reunirse en Bruselas con el comisario europeo de Agricultura y Desarrollo Rural, Dacian Ciolos, que el comisario "ha entendido perfectamente cuál es la problemática que tenemos con los cultivos de secano".

El jefe del Ejecutivo murciano, junto con el presidente del Comité de las Regiones, Ramón Luis Valcárcel, trasladó al comisario europeo la preocupación del sector agrícola regional ante las graves consecuencias de la sequía que sufre la Región, que ha ocasionado importantes pérdidas a la agricultura murciana y de todo el levante español, y le solicitó que se arbitren las actuaciones necesarias.

Alberto Garre también subrayó que "con independencia de ello, se van a llevar a cabo estudios y proyectos para articular una replantación de los cultivos afectados por la sequía, con variedades que sean más efectivas de cara a combatir las futuras sequías que se puedan producir y, por lo tanto, que haya una programación ya más estable si se presentan otras situaciones de este estilo".

"Está claro que se tienen que cubrir los daños que ya se han producido hasta el momento y, en la medida en que la Unión Europea pueda aportar más y también el Gobierno de la Nación, será mejor", indicó Garre, quien remarcó que "la cuestión es que quien ha sufrido los daños pueda paliarlos a través de las ayudas de los distintos organismos".

Entre las actuaciones urgentes y concretas que el presidente solicitó al comisario, y que pueden tener un importante alcance en este momento para los agricultores murcianos, Garre resaltó la "importancia de establecer medidas excepcionales" para que los agricultores puedan seguir percibiendo las ayudas agroambientales a la producción (producción integrada y producción ecológica), con el compromiso de volver a replantar y producir en un plazo establecido de tiempo.

Las ayudas agroambientales se enmarcan en el Programa de Desarrollo Rural, cofinanciado por la Unión Europea y los estados miembros. Estas ayudas están vinculadas a la productividad, por lo que, lo que se pide -aclaró el presidente- es que "dada la situación de excepcionalidad que sufre el cultivo de secano de la Región por la pérdida de gran parte de su producción, los agricultores perceptores deben seguir recibiendo estas ayudas".

Así, ambos presidentes entregaron al comisario un informe técnico elaborado por la Consejería de Agricultura y Agua de la Región de Murcia, y con los datos aportados por las propias organizaciones agrarias regionales, en el que se indica de forma pormenorizada las consecuencias de esta sequía tan prolongada durante este año.

Garre explicó que la superficie de cultivos de secano afectados por la sequía asciende a día de hoy a más de 140.000 hectáreas, siendo los cultivos más afectados el almendro, los cereales de invierno, el viñedo y el olivar, lo que ha supuesto hasta el momento unas pérdidas de producción que ascienden a 92.487 toneladas, y unas pérdidas económicas de 85 millones de euros.

Por otra parte, el presidente del Comité de las Regiones, Ramón Luis Valcárcel, que calificó de "dramática" la situación provocada por la sequía, trasladó a Dacian Ciolos las consecuencias que también está teniendo en el PIB, el crecimiento y el empleo de estas regiones, y aseguró que "el comisario europeo "está muy sensibilizado con esta situación".

Valcárcel dijo que "no es sólo un problema puntual de algunas regiones del sur de Europa, como Murcia, sino que se trata de un grave problema de la Unión Europea", por lo que reclamó la necesidad de identificar posibles medidas para resolver esta situación con urgencia.

A pesar de que la Unión Europea se ha dotado de algunos instrumentos para afrontar estas situaciones, como son ciertas medidas contempladas en la Política Agrícola Común (PAC), Feader o el Fondo de Solidaridad, según dijo Valcárcel, "es necesario arbitrar otras medidas más urgentes para afrontar la extensión del problema".

Otros sectores afectados

Además de los cultivos de secano también se han visto afectados de forma especial la ganaderia regional, con ganados ovino y caprino, así como el sector de la apicultura. En cuanto a los cultivos de regadío, esta situación ha provocado un aumento de costes y un mayor consumo de agua que en otros periodos.

El cultivo del almendro es el más afectado de todos, ya que las pérdidas totales sólo en este producto en la Región suman un total de 33,8 millones de euros. La persistencia de la sequía ha provocado que sólo durante el mes de abril y mayo la superficie afectada de almendro de secano haya aumentado, en este tiempo, en 4.984 hectáreas, llegando a un total de 70.047.

"Estas cifras muestran que los daños sobre el almendro de secano de la Región de Murcia están creciendo drásticamente, de modo que las parcelas se ven cada vez más afectadas, y con ello muchos agricultores que, no sólo pueden llegar a perder la cosecha de este año, sino todas producciones de otras campañas por lo que supone también de afectación a los árboles", señaló el presidente.

En este sentido, y desde el punto de vista de la sanidad vegetal, según se indica en el informe que se entregó a la Unión Europea, "los árboles muertos pueden llegar a ser focos de desarrollo de plagas, especialmente en estos meses de verano". Este riesgo obligará, tal y como han manifestado los agricultores, a su arranque y a quemar los árboles secos.

Medidas acordadas con los agricultores y el Ministerio de Agricultura

El presidente de la Comunidad recordó que ya se ha alcanzado un acuerdo con el Ministerio de Agricultura para atajar este problema, y que incluye una serie de medidas pactadas con el sector agrícola.

Estas medidas son, entre otras, la puesta en marcha de un plan de reconversión varietal que suponga la recuperación de la capacidad productiva con replantaciones y reestructuración varietal, a través de una orden de arranque y replantación; autorizar riegos de socorro donde las infraestructuras lo permitan y la apertura de pozos de sequía; reducción de módulos fiscales y otros impuestos, y establecer la concesión de avales para líneas de préstamo a bajo interés; permitir la entrada del ganado en las plantaciones de cereal sin posibilidad de recolección, y ayuda económica para la alimentación del ganado por la falta de pastos, además de garantías de avales para conseguir créditos para el sector ganadero.