Se plantea realizar ensayos de control biológico sobre la mosca blanca, mediante la suelta de algún parásito de gran especificidad para reducir las poblaciones de este vector
La Consejería de Agricultura y Agua ha comprobado que la situación actual del virus del rizado del tomate Nueva Delhi en cultivos como el calabacín y la calabaza es estable y no se ha agravado respecto a la campaña anterior. No obstante, mantiene la vigilancia sobre las nuevas plantaciones y aconseja extremar las medidas fitosanitarias para mitigar sus posibles efectos.
Desde la aparición de esta virosis, en agosto del pasado año, en el Levante español, y ante la gravedad de su afección en los citados cultivos, la Consejería estableció, de acuerdo con el sector productor, una serie de medidas para reducir las poblaciones del insecto vector que la transmite. Se trata de una pequeña mosca blanca denominada Bemisia tabaci, que afecta a numerosas especies hortícolas y ornamentales.
La Consejería publicó una Orden el pasado mes de febrero que establece medidas fitosanitarias obligatorias para todos aquellos agricultores que cultiven plantas sensibles a esta virosis (solanáceas y cucurbitáceas); medidas tales como un paro biológico entre los meses de diciembre a febrero, en los que no se podrá realizar plantaciones al aire libre de estas especies, así como la destrucción de las parcelas afectadas.
El objetivo de estas medidas es romper el ciclo biológico de la citada mosca, reducir sus poblaciones y, en definitiva, la presión de la virosis en las primeras fases de cultivo sobre las plantaciones de melón y otras especies y otras especies que se implanten de cara a los meses de primavera y verano.
La Consejería refuerza estas actuaciones con acciones formativas dirigidas a los agricultores de las distintas zonas productoras, la elaboración de una guía de recomendaciones fitosanitarias para combatir dicha virosis y la realización de numerosas prospecciones en los cultivos de nueva implantación, como melón, sandía, pimiento, tomate y patata.
Controles
De los controles realizados sobre el terreno por técnicos del Servicio de Sanidad Vegetal se desprende que no ha sido necesario realizar ninguna actuación sobre parcelas que presenten problemas de dispersión de la enfermedad. No obstante, la Consejería tiene previsto intensificar estos controles y prospecciones para asegurar el cumplimiento de esta norma.
También se plantea la posibilidad de realizar ensayos de control biológico sobre la mosca blanca, mediante la suelta de algún parásito de gran especificidad para reducir las poblaciones de este vector.
Asimismo, la Consejería ha establecido un plan especial de vigilancia sobre los productores de plantas hortícolas (semilleros), a fin de garantizar la ausencia de esta virosis en el material vegetal de partida. Hasta la fecha, en ninguna de las muestras tomadas se ha determinado la presencia del virus de Nueva Delhi, lo que demuestra la profesionalidad de los productores de material vegetal en la Región y la total garantía de este.