La Unión Sindical Obrera – USO – de la Región Murciana tras la publicación en el día de hoy de los datos relativos al déficit público, que eleva este en nuestra Comunidad en los 9 primeros meses del año en el 1,68%, superando ya en 0,9 décimas al máximo fijado por el Ministerio de Hacienda para todo el año (1,59%), muestra su preocupación por el hecho que nuevamente nuestra región encabece otro liderazgo negativo, el enésimo de datos macro-económicos de todas las comunidades Autónomas. Aunque el de la Comunidad Foral de Navarra es mayor, solamente es debido a que tiene un calendario distinto de ingresos y gastos.
Preocupación por los efectos colaterales que pueden suponer para la ciudadanía, un nuevo reajuste por el Gobierno Regional para su contención en los 3 meses que restan para terminar el año.
El Gobierno regional esta siendo incapaz de controlar las cuentas públicas, se encuentra en los datos en los 9 primeros meses del año con un déficit superior al doble de la media nacional, establecida en el 0,84%, y todo ello a pesar de tener nuestra región uno de los niveles máximos de permisividad del déficit.
Por lo que más allá, de las promesas sin fecha de un sistema de financiación más justo para nuestra Comunidad, nuevamente se tenga que acudir a un nuevo "rescate" del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), al igual que el año pasado.
La USO advierte del alto riesgo que supondrían nuevos recortes y tijeretazos por parte del Gobierno Regional en sectores básicos del gasto social, como pudieran ser más Congelación de pagas extras, depreciaciones en Sanidad, Educación o Dependencia, con el fin de enmendar el desfase de dicho déficit.
Si quieren recortar, todavía hay partidas donde se pueden hacerse sin perjudicar a las mayorías sociales trabajadoras y a las PYMES, como son las abundantes, repetitivas y perpetuas de las Subvenciones Nominativas que año tras año figuran en los Anexos de los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma (para el 2.014 también), reconducir instituciones obsoletas para su coste, gastos suntuarios, obras sin utilidad en el tiempo y reducción de cargos públicos y asesores al mismo tiempo que sus remuneraciones.