La producción regional de plantas de vivero de frutales es de 1,4 millones, principalmente de almendro, melocotonero y ciruelo

El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, inauguró hoy la Jornada Técnica 'Organización viverística y su impacto en la producción frutal', que organiza el Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (IMIDA) y el Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS-CSIC), con la que se pretende transferir al sector productor los resultados de la investigación en la mejora varietal de cultivos frutales.

El titular de Agricultura y Agua indicó que "los frutales necesitan una reconversión permanente porque los gustos del consumidor van cambiando" y por tanto, dijo, "tenemos que estar en los mercados ante productos de terceros países que reducen sus costes de producción y hay que competir con calidad y seguridad".

El consejero de Agricultura añadió que la Región "ha promovido un interesante programa de mejora varietal que se está realizando de la mano del sector productor", en cultivos como melocotonero, nectarina, cerezo, albaricoquero, ciruelo japonés y almendro.

Explicó que el sector productor de viveros de frutales "es uno de los más tradicionales en la Región de Murcia", que se localiza principalmente en la comarca del Noroeste, en los municipios de Moratalla y Caravaca. La producción regional de plantas de vivero de frutales es de 1,4 millones, principalmente de almendro, melocotoneros y ciruelo. En la Región hay 40 viveristas inscritos que generan con su producción un valor económico de cinco millones de euros.

Además, en la Región hay ubicadas cinco empresas obtentoras con "serios programas de selección para la obtención de nuevas variedades que sean resistentes o tolerantes a virosis", subrayó Cerdá. Añadió que el sector viverista "sigue avanzando en la modernización del sistema productivo" y resaltó que "el objetivo es la obtención de un material vegetal de partida que cumpla con los adecuados requisitos fitosanitarios y con las exigencias que establecen los productores".

Cerdá destacó que "el material vegetal de la Región se considera de una total garantía varietal y sanitaria", tanto por la profesionalidad de los viveristas como de los "exhaustivos controles" que realiza el Servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura, con más de 3.000 pruebas analíticas sobre las principales virosis que afectan a las especies de frutales.