El Grupo Parlamentario Socialista ha presentado una enmienda a la totalidad a la Proposición de Ley sobre Medidas en Materia Tributaria, de Sector Público, de Política Social y otras Medidas Administrativas, presentada por el Grupo Parlamentario Popular a instancias del Gobierno Regional. Rechaza esta Proposición de Ley por inconstitucional e injusta.
La responsable de Política Social del Grupo Parlamentario Socialista, Teresa Rosique señaló calificó esta Proposición de Ley como "demoledora", porque supone "un nuevo hachazo a los derechos de las personas en situación de dependencia y se suma a los recortes y copagos aprobados con anterioridad por los gobiernos de Rajoy y de Valcárcel".
Además, explicó, supone una nueva vuelta de tuerca a los dependientes porque modifica aspectos fundamentales como el plazo para resolver los expedientes o la pérdida de garantías jurídicas, así como el derecho a recurrir por el incumplimiento del plazo; el acceso a las ayudas económicas en el entorno familiar; el copago; el derecho de los dependientes a poder ser atendidos en su entorno familiar; la aplicación del carácter retroactivo de los recortes, denunciada en su día por el entonces Defensor del Pueblo, o la desaparición del carácter público de los servicios, al considerar como deuda la parte que no puedan pagar los dependientes. Esta Proposición afectará, de una u otra manera, tanto a los dependientes que están recibiendo prestaciones como a los que no las reciben.
Rosique denunció que "de nuevo el Partido Popular utiliza a nuestra Comunidad Autónoma y a las miles de personas dependientes que aquí viven como laboratorio de aplicación de sus insaciables recortes en materia de dependencia, tal y como paso el año pasado con la Ley Regional de Recortes de 29 de junio y posteriormente con el Real Decreto de Mariano Rajoy de 13 de julio".
Reprochó que el Partido Popular se haya estado negando a aceptar las reiteradas propuestas planteadas desde el Grupo Parlamentario Socialista para garantizar nuevos ingresos procedentes de las rentas más altas; las cuales hubiesen servido para financiar cuestiones sociales de primer orden como la Ley de Dependencia. "El impuesto de patrimonio, el de sucesiones, el tramo autonómico del IRPF, o los impuestos a grandes superficies comerciales y entidades bancarias suponían una vía fundamental de ingresos que el Partido Popular se ha estado negando a aplicar y que ahora, aunque tarde viene a darnos la razón, lo que no le exime de su responsabilidad por haber perdido durante años unos recursos económicos que podían haber servido para evitar recortes sociales".
La Proposición de Ley del PP suprime derechos de los ciudadanos recogidos en leyes estatales, algo que no se puede hacer; pues elimina el plazo de seis meses establecido en la ley estatal para resolver los expedientes de dependencia. "De esta forma se retrasa el acceso a las prestaciones por dependencia a miles de personas, sin que ello tenga consecuencia económica alguna para la Comunidad Autónoma".
Asimismo, se cambia por completo el espíritu de la ayuda económica en el entorno familiar recogido en la Ley de Dependencia, cuyo objetivo era garantizar la atención de los dependientes en su entorno. "El objetivo no es otro que impedir a miles de personas en situación de dependencia, acceder a la ayuda económica en el entorno familiar".
Cambios que pretende
Los cambios que esta Proposición de Ley pretende son los siguientes: El número de horas que se fija para reconocer la dedicación plena de la persona cuidadora pasa de 160 a 672 mensuales, o lo que es lo mismo, 22,4 horas al día sin descansar ni un día; la dedicación mínima pasa de 80 a 350 horas. Se exige convivir en el mismo domicilio que el dependiente y haberlo hecho como mínimo desde un año antes de la solicitud. No se permite que la persona cuidadora pueda estar apoyada por otras personas en sus funciones y no puede trabajar fuera de casa más de cuatro horas al día ni cobrar prestaciones por desempleo; y además, se le exige acreditar "capacidad intelectual suficiente" para desarrollar sus funciones.
En opinión de la parlamentaria socialista "estas medidas plantean la reclusión en el hogar de dependientes y cuidadores olvidando la autonomía personal como objetivo de la Ley de Dependencia. Parece que lo que se busca con la misma son esclavos y no cuidadores", manifestó.
Rosique agregó que a los requisitos inasumibles que exigen al cuidador, se suma la imposición de optar por una plaza de residencia o de centro de día si quieren acceder a la Ley de Dependencia. "Estos condicionantes se imponen a pesar de que la Comunidad Autónoma no cuenta con los servicios necesarios para ello y son más caros, por lo que lejos de producir un ahorro se incrementará el gasto, salvo que lo que se pretenda sea que los dependientes renuncien a las ayudas y prestaciones".
Por otro lado, se incrementa el copago y se reduce el mínimo exento del patrimonio neto a 20.000 € para calcular el copago; actualmente, el mínimo exento para la dependencia es el que se establece en el Impuesto de Patrimonio y está fijado en 700.000 euros y el de la vivienda habitual en 300.000.
También el copago del servicio de Ayuda a Domicilio se incrementa considerablemente. Una persona con 700 euros de renta pasará a pagar por hora entre 3,61 y 2,63 euros según el número de horas, cuando en 2011 pagaba 0,88 euros por hora.
El precio máximo de referencia de centro de día para menores de 65 años se establece en 1.100 euros, lo que supone un incremento de 100 euros, incumpliendo el acuerdo de los tres grupos parlamentarios recogido en una enmienda a los presupuestos de 2013, que lo fijaba en 1.000 euros. Teresa Rosique denunció que "este incremento sólo tiene una explicación, subir el copago, ya que lo que el IMAS paga por plaza a los centros de día no llega a mil euros".
Las ayudas económicas en el entorno familiar sufrirán un nuevo recorte y se incrementará el copago por plaza de residencia como consecuencia de las modificaciones que esta Proposición de Ley establece para calcular la capacidad económica de los dependientes. Se incrementa, igualmente, el copago de las personas que perciban una ayuda por minusvalía.
Por otra parte, van a considerar como deuda la diferencia entre lo se que paga por una plaza de residencia o centro de día y el precio de la plaza y la van a cobrar en "diferido". La diputada explicó que "todas las personas que estén ocupando una plaza de residencia o de centro de día y su capacidad económica no sea suficiente para cubrir el coste del servicio, estarán en deuda con la Administración, deuda que según esta Proposición de Ley será cobrada. Este es el mayor copago en "diferido" que quieren aplicar ya que la deuda la pagarán los herederos.
Con esta medida desaparece por completo el carácter de servicio público y va a afectar a la mayoría de personas que ocupan una plaza de residencia o de centro de día cuya capacidad económica está muy por debajo del precio de referencia. Aplican los recortes con carácter retroactivo a pesar de que el defensor del pueblo advirtió de fraude de ley.
Se amplía de cinco a ocho años el plazo para pagar lo que debe la administración a dependientes o familiares en concepto de prestaciones económicas, incluido 2013.
A todas las personas que hubiesen solicitado acogerse a la Ley de Dependencia después del RD de Rajoy de 13 de julio de 2012 y no se les haya reconocido la prestación, se les aplicará esta Ley y tendrá que presentar nueva documentación en el plazo de seis meses para acreditar que cumplen los nuevos requisitos y se suspende por dos años o 30 meses, como mínimo, el derecho reconocido de la prestación económica.
Ante esta Proposición de Ley "claramente inconstitucional", el Grupo Parlamentario Socialista ha presentado una enmienda a la totalidad para que sea retirada y no se apliquen los nuevos e injustos recortes del PP en dependencia.