Los efectivos potencian sus destrezas a través de cinco niveles de capacitación y uno de perfeccionamiento impartidos durante 11 meses en la Escuela Regional de Policías Locales

El consejero Manuel Campos subraya que la formación policial es "imprescindible para dotarles de habilidades que les permitan neutralizar agresiones o acciones violentas y reducir a sus autores"

Un total de 118 efectivos de los cuerpos de la Policía Local de la Región han adquirido nuevas técnicas y habilidades de defensa personal policial, unos conocimientos que están encaminados a potenciar las destrezas apropiadas para reaccionar de manera adecuada ante una situación de riesgo y garantizar la seguridad ciudadana.

El itinerario formativo, impartido en la Escuela Regional de Policías Locales dependiente de la Consejería de Presidencia, tiene como finalidad aumentar y automatizar las destrezas de defensa personal policial, mediante ejercicios prácticos y con ejemplos reales, para que constituyan una herramienta más de trabajo.

El consejero de Presidencia, Manuel Campos, afirmó que en muchas ocasiones los policías se enfrentan a situaciones que entrañan el uso de la fuerza física, por lo que "es necesario dotarles de habilidades que les permitan neutralizar las agresiones o acciones violentas y reducir a sus autores, preservando la seguridad de las personas objeto de esta violencia y la de ellos mismos".

Campos remarcó que una adecuada preparación de los agentes, además de incrementar la eficiencia policial, "es la mejor garantía para prestar un mejor servicio en defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos".

En este sentido, resaltó que en el ejercicio de su profesión la Policía ha de mantener "un difícil equilibrio entre el cumplimiento de su misión, peligrosa en muchas ocasiones, y el uso cada vez más restrictivo de las armas, reservándose éstas para determinados supuestos en los que exista un riesgo racionalmente grave para la vida o la integridad física".

El titular de la Consejería de Presidencia recalcó que esta formación "ha de extenderse durante todo el desarrollo de la carrera policial, con el fin de mejorar su actuación, pues se trata de una exigencia de fondo para prestar un buen servicio al ciudadano".

Mayor eficiencia policial

Las técnicas de detención, inmovilización y arresto, caídas, formas de golpeo con el tren superior e inferior, y el uso del bastón policial rígido, semirígido y extensible, son algunas de las tácticas de autodefensa impartidas en los cursos de defensa personal policial a fin de que sirvan de instrumento para reducir al mínimo el daño causado cuando el uso de la fuerza física sea imprescindible.

El programa formativo, con un marcado carácter práctico, se ha estructurado en cinco niveles de capacitación y uno de perfeccionamiento, atendiendo a los diferentes grados de dificultad y especialización para dotar al policía de la capacidad necesaria para el cumplimiento de su función de proteger los derechos y libertades de los ciudadanos.

En el nivel de iniciación participaron 28 efectivos, 21 agentes aprendieron destrezas en el nivel básico, 38 policías asimilaron técnicas en el nivel de capacitación medio, 19 efectivos se formaron en el nivel superior, dos policías en el nivel técnico y, por último, diez agentes adquirieron habilidades de perfeccionamiento.

El 77 por ciento de los alumnos han realizado y superado los niveles de formación, impartidos en 64 horas lectivas distribuidas en 32 sesiones a lo largo de once meses.