Se han entregado casi 5.000 euros para los talleres de arte y danza para personas con síndrome de Down
Rotary Club Murcia ha hecho entrega esta mañana a la asociación ASSIDO de un cheque por valor de los casi 5.000 euros recaudados en su II Concierto Solidario. La entrega se ha realizado en las instalaciones de la Asociación para Personas con síndrome de Down de Murcia en la pedanía Murciana de Casillas coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Síndrome de Down. Allí se realizan numerosos talleres relacionados con las artes plásticas que se verán beneficiados por esta financiación.
Francisco Ruiz-Gijón, presidente del Rotary Club Murcia, ha sido el encargado de realizar la entrega en representación de esta entidad a un grupo de personas con síndrome de Down que lo reciben en nombre de las más de 300 familias que impulsan la entidad sin ánimo de lucro ASSIDO, integrada en FEAPS Región de Murcia.
El II Concierto Solidario Rotary Club Murcia se realizó el pasado 15 de febrero en el Auditorio 'Víctor Villegas' de Murcia y contó con la participación de la Orquesta Sinfónica y Coro del Conservatorio Superior de Música de Murcia interpretarán piezas de Juan Cristónomo Arriaga, Manuel Moreno-Buendía y Javier Artaza.
Rotary Club Murcia ha apostado por la labor de ASSIDO y la recaudación del concierto ayudará a seguir ofreciendo a las personas con Síndrome de Down y otras discapacidades intelectuales actividades como los talleres de artes plásticas y danza. Más allá del valor terapéutico, el arte se emplea en ASSIDO como vía para permitir la expresión y comunicación de las personas con diversas capacidades a través de los lenguajes artísticos, así como el desarrollo de la creatividad.
ASSIDO nació en 1981 de la unión de pocos padres de personas con síndrome de Down de Murcia se unieron para conseguir los servicios y apoyos que sus hijos necesitaban. Con el tiempo, se han crecido hasta reunir a más de 350 familias y han evolucionado sus necesidades tanto por la edad de sus socios como por sus conquistas sociales. Lo que sí se mantiene inalterable es el objetivo en común: mejorar la calidad de vida de sus hermanos, hijos, y familiares con síndrome de Down y otras discapacidades intelectuales.