El diputado regional socialista Francisco Javier Oñate, declaró, a raíz de las informaciones aparecidas en los últimos días sobre las intenciones del Gobierno regional del PP con respecto a la televisión autonómica, que "de ser sinceras estas manifestaciones, da la sensación de que, como San Pablo, ahora se han 'caído del caballo' y han descubierto que el modelo que impusieron tiene graves problemas y hay que cambiarlo".
Oñate destacó que, en la televisión autonómica, hay al menos tres cuestiones a corregir: el coste económico, el modelo de gestión, y el modelo de programación y la parcialidad de los informativos.
En cuanto al coste económico, el diputado socialista puso de manifiesto que, en los pocos años que lleva en funcionamiento, la televisión de Valcárcel lleva gastados más de 200 millones de euros, "una cantidad enorme y que ya quisiera tener el Gobierno regional ahora en sus manos para aliviar la deuda con los proveedores".
En cuanto al modelo de gestión mixta, según Oñate "al final sólo ha servido para encubrir lo que cuesta la programación, y en algunos medios especializados ya se dice que el coste de algunos programas de La7 supera en mucho los precios que hay en el mercado".
"También es necesario corregir el modelo de programación y la parcialidad de los informativos, la falta de contenidos de verdadera utilidad pública, y el abuso de la contratación de 'estrellas' frente al periodismo regional", añadió.
Las cuentas claras
Por otro lado, Francisco Javier Oñate afirmó que, "si es que de verdad el Gobierno regional está dispuesto a cambiar de postura, como ya le hemos venido pidiendo, lo recibimos como una buena noticia, y nosotros también estamos dispuestos a colaborar en el seno de la Asamblea Regional en cuál debe ser ese nuevo modelo de la televisión autonómica".
"Pero, en todo caso, mientras que comienzan los trabajos, tenemos que pedirle al Gobierno regional, para que sea creíble su 'buena voluntad', de que de verdad están dispuestos a poner en marcha un importante adelgazamiento de los costes, dos cosas: en primer lugar, que, igual que se hace con la televisión pública nacional, el nombramiento del director general se haga en consenso con la oposición; en segundo lugar, que se pongan a disposición de todos los grupos parlamentarios las cuentas generales de la televisión autonómica, para que podamos conocer las grandes cifras de gastos y de los costes de los programas, porque queremos saber exactamente la relación de costes con la calidad de los programas que se están pagando", finalizó.