La Federación de Cooperativas Agrarias de la Región (Fecoam) participa un año más en la Semana de los Hábitos Saludables que organiza el Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca, y que cumple ya su octava edición. La organización ha patrocinado una pirámide nutricional que ha sido inaugurada esta mañana por el presidente de Fecoam, Santiago Martínez, y el director, Antonio Sanz, junto con Manuel Alcaraz, gerente de la Arrixaca, José Antonio Alarcón, gerente del Servicio Murciano de Salud y Eduardo González, jefe del Servicio de Salud del Ayuntamiento de Murcia.

La pirámide ha sido montada por los profesionales de cocina del hospital y alumnos de la Escuela de Hostelería del IES La Flota, y está compuesta por frutas y hortalizas de primera calidad aportadas por las cooperativas asociadas a Fecoam.

Esta iniciativa forma parte de la gran implicación de la Federación de Cooperativas Agrarias para la promoción de una alimentación adecuada. Con este fin, ha realizado numerosas campañas para fomentar los productos de las cooperativas agrarias, así como el consumo de frutas y hortalizas en las escuelas para promover hábitos saludables desde las edades tempranas, que contribuyan a mejorar su calidad de vida.

Santiago Martínez ha declarado que en estos momentos se debe de apostar más que nunca por una alimentación sana, y para ello se debe de empezar por la educación a los más pequeños. "Para una buena alimentación, -ha señalado-, no hay nada mejor que los productos de las cooperativas, de contrastada calidad y que cumplen las normas más exigentes de seguridad".

Martínez ha destacado que se controla en todo momento el recorrido del producto, "desde que sale de la parcela hasta que llega al consumidor", lo que evita que pueda ocurrir cualquier problema.

El director de Fecoam, Antonio Sanz, ha apuntado que fomentar los hábitos saludables es un objetivo que persiguen desde hace años. También ha subrayado el gran compromiso que las cooperativas tienen en este tipo de actos, y ha recordado la gran respuesta del sector tras el terremoto de Lorca. Las cooperativas han aportado más de 35 toneladas de productos para los damnificados, además de abrir una cuenta solidaria para hacerles llegar bienes de primera necesidad.