La viceportavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Begoña García Retegui manifestó al término de la Comisión de Economía que el presidente Valcárcel "tiene que erradicar el despilfarro de la Comunidad autónoma, porque de lo contrario, la bola del déficit y la deuda provocará además de no poder pagar a los proveedores, no podrá proveer los servicios públicos fundamentales.
Para García Retegui "es una tomadura de pelo" que la consejera de Economía diga que la Hacienda regional tiene un problema coyuntural, "porque el problema es estructural debido al despilfarro y a no haber tomado decisiones adecuadas en su momento".
El cuento de la lechera
García Retegui indicó que el año 2004/2005 "fue el año cero del cuento de la lechera: ingresos coyunturales ligados al sector inmobiliario, junto a un incremento desbordado de los gastos corrientes estructurales, lo que nos ha situado en suspensión de pagos".
Recordó, además, que en 2005, el Ejecutivo regional aprobó una subida de los impuestos gestionados por la Comunidad Autónoma, Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, lo que elevó la presión fiscal a los ciudadanos. "Como decíamos los socialistas entonces se vivía de la especulación inmobiliaria ligada a la corrupción y se ponían todos los huevos en la misma cesta".
La diputada consideró este tiempo como "años desaprovechados para ordenar las cuentas, pagar a los proveedores del Servicio Murciano de Salud, que ya entonces, en los años de aparente riqueza regional soportaba un creciente déficit, que se ha convertido en insostenible en los momentos actuales".
Begoña García Retegui los consideró, asimismo, como años de creación de empresas públicas "ad hoc", de descontrol en el gasto, "de despilfarro a espuertas".
La rebaja en la calificación de la deuda regional por las agencias hace más patente, si cabe, la debilidad de la economía regional y el "oscuro" panorama. Esta rebaja, según la parlamentaria, "hará que tengamos que pagar más intereses, que nos sea más difícil financiarnos". El recurso al endeudamiento creciendo de manera exponencial obligará, sin duda, igualmente "a una subida de impuestos y a trasladar a generaciones futuras una carga demasiado pesada".
La diputada advirtió que si el Ejecutivo de Valcárcel "no toma medidas ya, si no deja de despilfarrar y empieza a controlar el gasto, llevará a la Región a convertirse en una Diputación sin margen ni autonomía. El gobierno del PP nos va a dejar entrampados hasta los ojos, sin esperanza ni futuro", sentenció.