Esta obra, que mañana será llevada en procesión para ser subastada en una galería, ha levantado las iras de los vecinos más devotos de la zona y el rechazo, también, del Gobierno de Murcia, que al conocerla ha decidido retirar la subvención de 16.000 euros que había concedido a la campaña 'Arte por la sostenibilidad', organizada por el Área Comercial Murcia Centro junto a un grupo de artistas.
El crucificado se podía ver hasta anoche mirando hacia la calle desde la óptica, pero las susceptibilidades generadas han obligado al dueño del local a meterla unos metros y colocarla de espaldas al escaparate. No obstante, el boca a boca ha hecho que la tienda viviera hoy uno de sus días de mayor afluencia.
Pepe Yagües dice en declaraciones a EFE estar absolutamente sorprendido por la reacción popular, puesto que su intención era expresar con ironía, al igual que se hace en las Fallas de Valencia, su desacuerdo, en este caso, con la política cultural del gobierno murciano.
Sin embargo, el autor comenta orgulloso que muchos cargos electos y simpatizantes del PP le han felicitado hoy por esta obra, una escultura de Pedro Alberto Cruz crucificado, de 242x96x28 centímetros, y realizada con materiales reciclados como madera, acero, cartón, 500 euros y poliespán.
El personaje lleva tatuadas frases como "Soy tan COOLto que paso del vulgo", "los ya-cimientos los reciCOOLo en aparcamientos", "a los artistas murcianos (catetos) los llevo(clavados) en el COOLrazón, "el dinero del Murciano lo quemo con entusiasmo" y "Sin curriCOOLo nímio, puedes hacer el indio (y canibalismo), entre otras, en referencia al eslogan promocional de la Consejería de Cultura "Cool-tura".
Desde el Gobierno de Murcia han alegado que algunas de las obras expuestas no fomentan el comportamiento ambiental responsable y que se "falta al respeto" al consejero de Cultura, en palabras del director general de Planificación, Evaluación y Control Ambiental, Francisco José Espejo.
Espejo ha explicado a EFE que la consejería decidió colaborar con esta iniciativa para concienciar de la necesidad de reducir la generación de residuos e incrementar el reciclaje, además de potenciar el comercio del centro, "pero la campaña no está cumpliendo con este fin" y, en su lugar, "falta al respeto".
"No pretendemos limitar la libertad de expresión de nadie, ni censurar nada, pero hemos decidido retirar nuestro apoyo a esta campaña, porque lo que se intenta denunciar el artista corresponde a otros foros y no a éste", ha asegurado Espejo.
A esta opinión se ha sumado también la portavoz del Gobierno murciano, María Pedro Reverte, al decir en rueda de prensa que la ayuda dada a los comerciantes era para fomentar el reciclaje y la sostenibilidad "y no para insultar a nadie".
Desde la consejería de Cultura han declinado hacer declaraciones a este respecto, argumentando que la decisión de la retirada de la ayuda al proyecto de los comerciantes murcianos es competencia de otro departamento, en este caso Agricultura y Agua.
En un comunicado, los artistas participantes han lamentado la decisión de retirar su apoyo a esta campaña, en el marco de la cual diversos escaparates de comercios del centro de la ciudad albergan esculturas, fotografías, pinturas, grafitis e instalaciones realizadas con materiales de desecho, en las que sus autores han lanzado a la calle sus definiciones de sostenibilidad.
En la muestra expuesta en 130 escaparates de tiendas del centro de Murcia intervienen Manolo Belzunce, Tomás Valmazza, Manuel Pérez, Nicolás de Maya, Pepe Yagües, Iván Planes, Juan de la Cruz Megías, MUHER, Ramón González Palazón, Joaquín Clares, Pablo Giménez (Chipone), Mariano Serrano, Frédéric Volkringer, Jacobo Peralta, Pedro Noguera (Pigüo), Dora Catarineu, Juan Antonio Díaz, Marta Abellán y el grafitero Frito.
La polémica escultura, sin subvención ahora y con el rechazo también de los vecinos de la óptica, saldrá mañana en procesión a las siete de la tarde de ese local en dirección a la galería La Aurora, donde será subastada para recaudar fondos para los damnificados de Haití. EFE