Por Baldo Cortón
Murcia, 30 ene (EFE).- Lucía López Ferrándiz, una montañera de 21 años estudiante de enfermería, emprenderá el 15 de abril próximo, sin oxígeno y en solitario, la subida al Cho Oyu (China), un pico de 8.201 metros que, si consigue coronarlo, la convertirá en la europea más joven en alcanzar la cima de un "ocho mil".
En una entrevista con la Agencia EFE, esta montañera, jefa del grupo de rescate de Protección Civil del ayuntamiento de Murcia, ha contado que descubrió la pasión por la montaña a los 16 años al hacerse voluntaria de este grupo y a raíz, también, de la experiencia con el GAME (Grupo de Alta Montaña Español).
Entonces participó en un "stage" de escalada en hielo y en roca y conoció al famoso alpinista Juan Carlos García Gallego, quien le explicó cómo es un ascenso al Cho Oyu y qué se encontrará en esta aventura.
Lucía López "se enfrenta" en este reto a la inglesa de origen iraní Maryam Khousravi, que a sus 22 años es hasta ahora la europea más joven en hacer un ocho mil porque ha coronado, también, la cumbre china.
Esta joven aventurera dice que la montaña es muy cambiante y que impone sus condiciones. "Tiene siempre la última palabra y aunque vayas muy preparado el riesgo está ahí".
Su escaso presupuesto no le da más que para los vuelos, la comida, el equipo y los permisos que hay que pagar al gobierno chino, entre ellos una fianza de 3.000 euros en concepto de "tasa de basura" que se devuelve al bajar, pero sólo si cuentas con los mismos envoltorios que tenías a la subida.
Lucía subirá al Cho Oyu sin oxígeno porque no tiene los 4.000 euros que pide un sherpa para transportar las cinco bombonas que requiere una ascensión de este tipo, a razón de 400 euros cada una.
Ello no le supone un hándicap, según comenta a EFE, porque cree que los que suben con oxígeno "si en algún momento se quedan sin él sufren lo mismo que si los plantaran a esa altura sin ningún tipo de aclimatación", con el riesgo de edema cerebral o embolia pulmonar.
Lucía López ha incluido en su preparación para subir al Cho Oyu (8.201 metros) la subida al Aconcagua (Argentina) el pasado 7 de marzo, de 6.962 metros, donde el apoyo y cariño de la gente del club universitario de montaña de Murcia fue determinante.
En el ascenso al Aconcagua se encontró con dos argentinos que la acompañaron a la cima, uno de los cuales sufrió congelación en los pies de segundo grado al bajar, y ella principio de congelación.
Para lograr el reto que se ha propuesto, del 21 al 28 de febrero viajará a entrenarse a Noruega "en las mejores cascadas de hielo de Europa", junto a compañeros del Centro de Tecnificación de Alpinismo.
Un mes después, el 31 de marzo, llegará a Katmandú (Nepal), tras lo que hará un trekking de preparación antes de plantarse en el campamento base del Cho Oyu, en el que pasará cinco días de aclimatación con la esperanza de encontrar algún compañero de escalada entre los muchos grupos que en esas fechas acuden a la zona.
El regreso lo ha fijado en el 20 de mayo, aunque ha previsto un posible segundo intento, por lo que el viaje de vuelta no lo ha cerrado hasta el mes de junio.
Esta aventurera cuenta orgullosa que su madre hizo el camino de Santiago en solitario, y ahora ella emprende el camino de un 8.000 sola y sin ningún tipo de ayuda, a una edad que ninguna otra mujer en Europa se ha atrevido a subir una de las 14 cimas del mundo.
"Haga cumbre o no la haga seguiré haciendo montaña", asegura con una amplia sonrisa y los ojos y las palmas de las manos muy abiertas como segura de lo que quiere, aún sabiendo que el riesgo es máximo.
El periplo de Lucía está patrocinado por el Ayuntamiento de Murcia; el Club Universitario de Montaña; Decathlon Thader; la Asociación de Senderistas; la Dirección General de Deportes; el Instituto de Juventud; el Instituto de la Mujer; la Asociación Española de Técnicos Aikido; la Federación de Montañismo, y la Universidad de Murcia. EFE