El próximo 2 de enero entrará en vigor la Ley 4/2009, de 14 de mayo, de Protección Ambiental Integrada de la Región de Murcia, que actualiza los mecanismos legales de control de actividades, planes y proyectos con incidencia en el medio ambiente y deroga la Ley de Protección del Medio Ambiente de la Región de Murcia, aprobada en 1995.
En la nueva ley regional se desarrollan y ensamblan todos los dispositivos de protección frente a la contaminación, como directrices, planes, autorizaciones o evaluación ambiental de planes y proyectos, entre otros, que provienen en su mayoría de directivas europeas y que fueron incorporados al ordenamiento estatal de manera dispersa mediante normas básicas.
Desde que fue publicada en el Boletín Oficial de la Región de Murcia el pasado 22 de mayo, la Consejería viene trabajando con distintos sectores empresariales, organismos e instituciones. El próximo 22 de enero se darán a conocer las conclusiones de las diferentes jornadas que se celebraron, así como el plan de acción conjunto que se desarrollará a lo largo de 2010 para que la aplicación de la ley sea aporte los beneficios esperados.
El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, destacó que “el hecho de que la nueva norma reduzca de manera importante el número de proyectos sometidos a evaluación de impacto ambiental supondrá un beneficio indudable para el desarrollo económico de la Región, sin menoscabo de la protección ambiental”.
Señaló asimismo que permitirá apoyar a las administraciones locales que disponen de menos recursos, valorar y unificar criterios y fomentar la acción común en campañas y proyectos ambientales. En este sentido, resaltó que “aunar recursos humanos, técnicos y económicos ahorrará costes tanto a las administraciones como a los sectores de actividad”.
Gestión integrada
El nuevo texto ofrece un modelo de gestión integrada de autorizaciones ambientales para coordinar y sistematizar todos los permisos ambientales con un sistema de ventanilla única, lo que posibilita también la reducción de los plazos de tramitación.
La gestión integrada permite asimismo encontrar soluciones globales a la contaminación producida por las industrias y evitar que ésta se traslade de un foco a otro dentro de una misma industria, para lo que se adoptará la solución más respetuosa con el ambiente.
La nueva norma satisface además la demanda de clarificar muchas de las ambigüedades generadas por las leyes estatales, susceptibles de redacciones abiertas, con lo que ofrece una mayor seguridad jurídica y certeza de las normas aplicables a todos los operadores afectados: empresarios, consultores y proyectistas, vecinos, asociaciones ecologistas y administraciones implicadas.
Para ello, la ley regula los procedimientos necesarios y permite que cualquier persona relacionada con la Administración sepa cómo, cuándo y dónde hacerlo. Los 160 artículos del texto le permiten actuar como una verdadera guía ambiental.
Autorización de actividades
Para conseguir su objetivo integrador, la citada ley distingue dos grandes categorías de actividades: las sujetas a autorización ambiental autonómica y las sujetas únicamente a licencia de actividad.
Una novedad en este ámbito es el incremento de las conocidas como actividades inocuas o exentas, aquéllas de escasa o nula incidencia ambiental, como una oficina o una mercería, para las que la tramitación de licencia se agiliza al máximo.
Los nuevos anexos de actividades exentas y sometidas a evaluación ambiental ya entraron en vigor cuando se publicó esta norma en el Boletín Oficial de la Región.