Una de los aspectos que destacan del balance del año 2009 para el secretario general de ASAJA Murcia, Alfonso Gálvez Caravaca, ha sido que “el Gobierno que preside Rodríguez Zapatero da la espalda a las necesidades de los agricultores y ganaderos de la Región, mientras estos han de hacer frente a graves problemas como la crisis citrícola, la caída de los precios en origen, la competencia desleal de terceros países o el endurecimiento de la normativa sobre fitosanitarios”.
El secretario general de ASAJA Murcia, Alfonso Gálvez Caravaca, ha calificado de “muy negativo” para el sector agrícola regional el año que ahora acaba, ya que, según ha apuntado, “han sido muchas las sombras que se han cernido sobre los intereses de los agricultores y ganaderos de la Región en los últimos doce meses”.
Según ha apuntado el máximo dirigente de ASAJA Murcia, “son múltiples las dificultades a las que han de hacer frente a diario los agricultores y ganaderos de la Región, que atraviesan uno de los momentos más difíciles de su historia”. El desproporcionado incremento de los costes de producción, la extremada fiscalidad agraria, la caída de los precios en origen y la competencia desleal de terceros países productores son sólo algunos de los factores que vienen a explicar la “complicada situación” que atraviesa el sector.
En este sentido, el titular de la organización agraria no ha dudado en apuntar “que sin lugar a dudas el 2009 se puede catalogar como uno de los peores años para el campo murciano, que atraviesa una situación crítica, mientras el Ejecutivo que preside Rodríguez Zapatero se mantiene impasible frente a nuestros problemas”.
Gálvez Caravaca, ha insistido en que “el presidente del Gobierno da la espalda al sector, especialmente en zonas como la Región de Murcia, donde se trata de un eje estratégico para la economía de la Comunidad”.
No obstante, ASAJA Murcia mantiene la esperanza de que el paro agrario y la gran movilización celebrada hace escasas semanas en Madrid hayan servido para “remover conciencias, principalmente políticas, de manera que sirvan para poner medidas urgentes que frenen las pérdidas constantes de poder adquisitivo de los agricultores”.
En esta misma línea, la organización profesional agraria espera que “las próximas reuniones mantenidas con representantes de la Administración central sean útiles para trazan un calendario efectivo de acciones que revitalicen, de forma definitiva, al sector agrícola de la Región de Murcia”.
Acuerdo entre UE y Marruecos
El secretario general de ASAJA Murcia, Alfonso Gálvez Caravaca, considera que “es inaceptable que el Gobierno español se muestre impasible ante los graves perjuicios que van a sufrir los productores de la Región de Murcia tras la aprobación de este acuerdo entre la Unión Europea y Marruecos en materia agrícola”.
No obstante, el acuerdo va más allá, ya que permitirá que Marruecos exporte frutas y hortalizas de una manera libre. Sólo tendrían contingentes ciertos productos sensibles como es el calabacín, el pepino, la clementina, la fresa y el tomate, aunque también mejorarían sus condiciones de entrada.
De igual manera, resultan sorprendentes las nuevas concesiones dadas en materia de comercialización de cítricos, en los que se eliminan todos los contingentes y se reducen un 30% los precios de entrada, salvo para la clementina importada de noviembre a febrero, que también verá ampliado el tonelaje máximo en 50.000 toneladas. Y resulta cuanto menos “poco prudente” otorgar tales facilidades cuando se sabe que el Plan Verde que promueve el Reino Alauita tiene como uno de sus primeros objetivos duplicar la producción citrícola actual hasta llegar a superar los 3 millones de toneladas.
Campaña citrícola
Gálvez Caravaca ha manifestado que la primera parte de la campaña citrícola “está dando mejores resultados que en temporadas anteriores, ya que ha aumentado el consumo, tanto en los mercados nacionales como en internacionales”. Un hecho que está motivado entre otras cuestiones por la bajada de las temperaturas en todo el continente europeo y por la llegada de las típicas enfermedades de la época invernal como la gripe.
En términos generales, se están cumpliendo con los auspicios de la Consejería de Agricultura y Agua, cuyos aforos vaticinaban una reducción de las cosechas, lo que ha provocado un aumento de los precios, a la vez que se han sumado unos cítricos de mayor calibre y más calidad que en otras temporadas. Lo que a fin de cuentas “está permitiendo llegar a un equilibrio idóneo entre la oferta y la demanda para el agricultor”.
Uva dominga
La actual temporada tiene unas perspectivas muy buenas, ya que se esperan recoger entre 12 y 14 millones de kilos de uva dominga en las explotaciones de Aledo, Totana y Alhama, la variedad que tradicionalmente se consume en Nochevieja.
Al hecho de que la uva tiene este año “una gran calidad” también se ha unido el hecho de que en la zona de Alicante, debido a las inclemencias meteorológicas se ha perdido gran parte de la cosecha de esta variedad, lo que ha hecho que el precio en origen suba ligeramente hasta situarse en los 0,70 céntimos el kilo.
Una negativa temporada para las frutas y hortalizas de verano
Aunque los agricultores no se esperaban una temporada tan infructuosa, al final los peores augurios se han confirmado, convirtiéndose el campo, una vez más, en un negocio muy poco rentable. “El principal motivo para llegar a esta situación se puede achacar al desplome de los precios en origen del limón, la naranja, la patata, el pimiento, el melón, la sandía, el melocotón, el tomate y la cebolla, que ha estado provocado por una sobreproducción y por los abusos que las grandes cadenas de distribución ejercen sobre el agricultor”, según apunta Gálvez Caravaca.
En este sentido, “una buena apuesta la constituiría el hecho de conseguir ordenar la producción, de forma que se evite un exceso de frutas y hortalizas que acaben colapsando los mercados, y que provoquen un descenso inusitado del precio de los productos”.
A la misma vez, otra opción que contribuiría a atenuar las actuales circunstancias que sufren las explotaciones agrarias se encuentra en la búsqueda de nuevas variedades agrícolas, satisfaciendo así las tendencias de consumo que se están imponiendo y sacando a los productos de las consecuencias que tiene para ellos la estacionalidad.
Sector ganadero
La cabaña ganadera murciana goza de una excelente salud y cumple con todos los condicionantes sanitarios necesarios para exportar cerdos con los niveles de calidad que exige el mercado internacional, aunque a lo largo de 2009 se ha visto también afectada por la crisis actual.
No obstante, Murcia sigue liderando, junto a Lérida, la producción de cerdos en España con un censo que representa el 10% del total nacional, y concretamente, el municipio de Lorca y el Alto Guadalentín son zonas productoras de este tipo de ganado, con el 46% de las explotaciones porcinas regionales.
Este sector genera en Murcia 10.000 puestos de trabajo directos y unos ingresos anuales de 340 millones de euros y representa el 70% de la producción final ganadera y el 20% de la producción final agraria regional.
Aceite
Para combatir el desplome de precios que viene sufriendo el aceite de oliva en los últimos meses la UE ha autorizado las ayudas a los productores para el almacenamiento privado de aceite de oliva durante un periodo de seis meses y para una cantidad máxima de 110.000 toneladas.
En este sentido, la organización agraria ha apuntado otra serie de reivindicaciones del sector y que pasan por negociar con la distribución para que se deje de utilizar el aceite como producto reclamo, con más del 60% vendido como marca blanca; la puesta en marcha de un código de buenas prácticas comerciales; la necesidad de políticas de apoyo a la concentración de la oferta o la necesidad de modificar la ley para que haya precios de referencia de compra.
Trasvase Tajo-Segura
En materia hídrica, la negociación en torno al Estatuto de Autonomía de Castilla La-Mancha, en el que se incluye la intención de derogar el Trasvase Tajo-Segura, ha mantenido en vilo a todos los murcianos.
El líder de ASAJA Murcia ha subrayado que “la continuidad del Tajo-Segura tiene que ser un hecho”, ya que “de dicha infraestructura dependen más de 147.000 hectáreas de regadío, 40 millones de árboles frutales y la economía de unas 70.000 familias”, ha destacado.
ASAJA Murcia, junto a los regantes, la administración regional y la sociedad murciana, va a “luchar con todas sus fuerzas hasta conseguir la eliminación de todos los artículos relativos a la caducidad de esta infraestructura, vital para nuestra Región y su agricultura”.