La consejera de Economía y Hacienda, Inmaculada García, presidió hoy la reunión del Consejo de Administración del Instituto de Crédito y Finanzas de la Región, que aprobó la línea de mediación para la financiación de inversiones y necesidades de circulante de las pymes de la Región, que pondrá en marcha el Instituto y que están dotadas con un fondo de cien millones de euros, procedente del préstamo concedido a esta institución por el Banco Europeo de Inversiones.
García manifestó que será el Instituto “el encargado de canalizar estos fondos a las pymes, a través de las entidades de crédito que operen en la Región una vez que se suscriba el acuerdo con dichas entidades”. En concreto, de los cien millones de euros, “cincuenta irán destinados a financiar los proyectos de inversión y los otros cincuenta a la financiación de circulante, ya que así nos lo ha pedido nuestro tejido empresarial”.
Podrán solicitar estos préstamos todas las pymes regionales, “incluso las de carácter agrícola, exceptuando las de promoción y construcción, porque así lo establece estatutariamente el Banco Europeo de Inversiones”, dijo la consejera. La condición que deben cumplir las entidades bancarias para suscribir estas líneas de mediación es tener abiertas más de diez oficinas operativas en la Región desde al menos el 31 de diciembre de 2008.
Condiciones de los préstamos
La titular de Economía y Hacienda manifestó que estos créditos tendrán condiciones muy favorables para las pymes que lo soliciten “con un interés del euríbor más 2,50 por ciento en el caso de las inversiones, y de un interés del euríbor más 3,50 por ciento en el caso del circulante”, dijo.
El importe máximo por beneficiario que pueden conceder a las pymes es de 2,5 millones de euros para financiación de proyectos de inversión y a 1,5 millones la financiación de necesidades de circulante. En caso de financiar un proyecto de inversión el plazo de amortización es hasta 12 años y un período de carencia de hasta tres años (sólo pago de intereses durante ese período), y en caso de financiar necesidades de circulante el plazo de amortización es de entre dos y cuatro años y un período de carencia de hasta dos años.