Murcia, 4 dic (EFE).- El defensor de José Vicente M.H., al que desde el pasado martes se juzga en la Audiencia Provincial de Murcia acusado de asesinar a su esposa de dos puñaladas, ha mantenido hoy durante la exposición de su informe que el acusado actuó "movido por el delirio que sufría por los celos".
Para el abogado José Muelas, "su celopatía le llevó a tener una percepción de la realidad distinta a la de una persona normal; vivía en un mundo en el que creía en la existencia de un complot contra él tramado por la víctima, la hermana de ésta y uno de los hijos del matrimonio".
Muelas ha defendido el informe realizado por dos psiquiatras del hospital "Román Alberca" y una psicóloga, que aseguran que José Vicente es una persona paranoide y narcisista que sufre un trastorno delirante de tipo celotípico, por lo que sería inimputable.
Por el contrario, ha rechazado el informe de los médicos forenses, para los que el procesado es plenamente responsable de sus actos.
"No dudo de la objetividad de los forenses, pero debo añadir --dijo el letrado defensor-- que no son psiquiatras y que todas las personas, aunque tratemos siempre de ser imparciales y objetivas, podemos equivocarnos".
Ha indicado también que su defendido es consumidor de opiáceos contra el dolor desde hace muchos años, y que su ingesta tan prolongada le ha producido una adicción que influye en su comportamiento.
Recordó que una vez cometido el crimen, y antes de conducir su coche con el cadáver dentro hasta la puerta de la Jefatura Superior de Policía de Murcia, el acusado se trasladó hasta su vivienda en Altorreal (Molina de segura) para recoger sus medicamentos.
Tanto el fiscal como la acusación particular y el abogado del Estado acusan a José Vicente M.H. de un delito de asesinato y coinciden en señalar que cuando ocurrieron los hechos no estaba afectado por enfermedad mental alguna.
El juicio, que se desarrolla ante un jurado popular, continuará el 9 de diciembre con la redacción y entrega del veredicto. EFE