El consejero de Agricultura y Agua asegura que “el único esfuerzo que ha hecho el Gobierno socialista ha sido el de sobreexplotar los acuíferos”
Las aportaciones del trasvase Tajo-Segura para la agricultura murciana fueron de 128 hectómetros cúbicos, “algo más” que en años anteriores pero “muy alejadas de la media de 369 hectómetros cúbicos trasvasados con el Gobierno del PP”
Asegura que el Gobierno regional no va a aceptar nada que pueda dañar lo más mínimo al trasvase Tajo-Segura, y añade que Castilla-La Mancha “intenta legislar sobre algo que no le corresponde”
Destaca el fracaso del Programa Agua y pone como último ejemplo el macroproyecto de la desaladora del Prat en Barcelona, cuyos gestores califican de “absurdo” dejar verter agua del río al mar para luego desalarla
El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, subrayó hoy que “los murcianos no estamos tranquilos porque el déficit del Segura sigue siendo un problema sin resolver”. El titular de Agricultura y Agua realizó estas declaraciones durante el balance del año hidrológico 2008-2009, que termina hoy.
El responsable de Agua del Gobierno regional subrayó que el problema del agua en la Región de Murcia “continúa sin solución” y centró las dos principales preocupaciones “estructurales” en esta materia en la falta de disponibilidad de agua para regadío, y en la sobreexplotación de acuíferos, “obligada por la escasez de recursos”.
Antonio Cerdá subrayó que la Región de Murcia “sigue teniendo una fuerte presión sobre la propia cuenca”, debido fundamentalmente a las extracciones de agua subterránea, que han sido, según dijo, “el único esfuerzo hidráulico que ha hecho el Gobierno socialista”, y que a la larga, “supone un desgaste medioambiental y un agotamiento de las aguas subterráneas”.
“Los problemas de la Región de Murcia sólo se solucionan con trasvases”, apostilló Cerdá, quien indicó que “la insolidaridad del Gobierno de España con las necesidades de esta Región han elevado el tono de enfrentamiento entre territorios”. Cerdá recordó que el Plan Hidrológico Nacional “planteaba soluciones concretas y viables”, como el trasvase del Ebro, cuya derogación “supuso la amenaza que ahora se cierne sobre el futuro del trasvase Tajo-Segura”.
Cerdá reiteró que el Gobierno regional “no va a aceptar nada que pueda dañar lo más mínimo al trasvase Tajo-Segura, ni fechas de caducidad, ni reservas que alteren su funcionamiento”, y añadió que Castilla-La Mancha “intenta legislar sobre algo que no le corresponde”, porque el agua “es un bien de Estado”.
Cantidades insuficientes
Durante el balance realizado ante los medios de comunicación, Cerdá explicó que en este último año hidrológico se han trasvasado 128 hectómetros cúbicos para regadío, “algo más que en los años anteriores pero insuficientes para compensar el déficit de nuestros regadíos”. Cerdá apuntó que esta cantidad está “muy alejada de la media de los envíos que trasvasó el Partido Popular en sus años de Gobierno”.
El consejero de Agricultura y Agua mostró un gráfico detallado de los caudales autorizados por el Gobierno socialista con una media de 105 hectómetros cúbicos, una cantidad “que no llega ni siquiera al 30 por ciento de los 369 que han venido a la Región en la etapa popular”, y “similar a la que la Región de Murcia obtiene de la depuración”.
Respecto a las aportaciones para abastecimiento, el responsable del Gobierno regional subrayó que “el agua para beber se ha ido reduciendo hasta llegar a un 25 por ciento menos con respecto a la cantidad máxima autorizada en los últimos años”. Esta situación, provocada por la sustitución de agua trasvasada por desalada, “ha arrastrado un incremento de la tarifa del agua que penaliza a las familias y a las industrias”, apostilló Cerdá.
El agua más cara de España
En este sentido hizo referencia al último informe publicado por el Instituto Nacional de Estadística, que sitúa a la Región de Murcia como la comunidad de España que más cara paga el agua, por delante incluso de Canarias y Baleares.
“Por primera vez en la serie estadística, rebasamos el precio del agua de las comunidades insulares”, aseveró Cerdá, quien subrayó que “pagamos un 50 por ciento más que la media nacional”, con 1,95 euros por metro cúbico frente a los 1,29 de media española, “y subiendo”, matizó, como consecuencia de la puesta en marcha de las desaladoras.
9.827 hectómetros cúbicos del Ebro al mar
El titular de Agricultura y Agua insistió en que “el agua sigue estando en el Ebro” y por tanto, “el trasvase del Ebro, es la principal fuente para corregir el déficit del Segura”. Los datos hidrológicos del año correspondientes a la cuenca del Ebro indican que este río ha vertido al mar en el período 2008-2009 9.827 hectómetros cúbicos, un dato que se eleva a más de 50.000 hectómetros cúbicos arrojados al mar durante la etapa de gestión de Rodríguez Zapatero.
Antonio Cerdá afirmó que la situación hídrica actual “un año más sigue siendo muy preocupante y no tenemos soluciones solventes”, y subrayó el fracaso del Programa Agua basado en las desaladoras.
El consejero de Agricultura y Agua mostró una información publicada recientemente en un diario de Barcelona sobre la planta del Prat en Cataluña “que está parada desde su inauguración”. Según este diario, los responsables de la planta califican de “absurdo” dejar verter el agua del río al mar para, a continuación, quitarle la sal. También aseguran que el agua desalada es muy cara y consume demasiada energía.
Cerdá manifestó que la Agencia Catalana del Agua argumenta “lo que el Gobierno regional viene defendiendo desde que se derogó el trasvase del Ebro”, y aclaró que “para que la agricultura murciana siga siendo competitiva necesitamos aportaciones externas de otras cuencas”.