En condiciones normales de cultivo las puestas realizadas por este díptero no resultan viables y por tanto no supone un problema
La Consejería de Agricultura y Agua ha presentado en Madrid a una delegación de funcionarios del Departamento de Control en Frontera (CBP) y del Departamento de Agricultura (USDA) de los Estados Unidos de América, los resultados preliminares del primer año de ensayo del protocolo de investigación desarrollado conjuntamente por el Servicio de Sanidad Vegetal y el Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario (IMIDA) para determinar bajo qué condiciones el limón Verna es susceptible de ser atacado por la mosca de la fruta (Ceratitis capitata).
Según el director general de Modernización de Explotaciones y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón, los primeros resultados ponen de manifiesto que “en condiciones normales de cultivo, las puestas realizadas por este díptero no resultan viables, ya que las condiciones del fruto resultan desfavorables para la supervivencia de las larvas recién emergidas”.
García Lidón destacó que “la delegación americana felicitó a la Consejería de Agricultura y Agua por la calidad de los trabajos desarrollados y manifestó un gran interés por la continuidad de los mismos a fin de conseguir resultados en un breve espacio de tiempo y modificar el ‘Work Plan’ que regula la exportación de limón a los Estados Unidos”.
Actualmente, para la exportación de limón Verna al continente americano es imprescindible que los huertos y envasadores se encuentren registrados por parte del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, y estar sometidos a un control sobre la presencia de esta plaga cuarentenaria. Además, las partidas exportadas deben someterse a un tratamiento de frío durante su transporte en barco.
Desarrollo de la investigación
Los trabajos de investigación, desarrollados en laboratorio, consisten en someter limones en distintas fases de desarrollo a una población de individuos de Ceratitis capitata y comprobar si las puestas realizadas sobre estos frutos pueden ser viables y, por consiguiente, suponer un problema para la exportación a Estados Unidos. Durante este periodo se han comprobado las variaciones de las características físico-químicas de desarrollo de los frutos con el fin de establecer una interpolación con los datos de frutos atacados.
El estudio demuestra que solo en el caso de que las puestas se efectúen en frutos senescentes o sobremaduros, por una recolección muy tardía, o bien por estar sometido su cultivo a condiciones de extrema sequía y elevadas temperaturas, puede dar lugar a la supervivencia de un reducido porcentaje de larvas.