La evolución de los precios es uno de los pocos aspectos que contribuye a favorecer la coyuntura económica, en el marco de un contexto repleto de indicadores muy desfavorables. De hecho, la inflación volvió a reducirse con intensidad en enero, alcanzando un nuevo mínimo histórico (0,4%) en la Región de Murcia, según el Índice de Precios al Consumo del INE.

Este resultado es siete décimas inferior al registrado en diciembre (1,1%) y mejora con creces la media nacional (0,8%), circunstancia que prolonga la tónica iniciada en 2008. Hay que significar que el indicador encadena once meses por debajo de la española y hace que la Región de Murcia sea la segunda comunidad autónoma con la tasa más baja.

Respecto a diciembre pasado, el IPC experimentó la intensa caída que caracteriza a los meses de enero (por las rebajas), si bien en 2009 el descenso del índice general (-1,7%) resultó más pronunciado que en años anteriores. En concreto esta bajada es sensiblemente superior al –1% de enero de 2008 o al –0,7% estimado en los meses de enero de 2006 y 2007.

Ello se explica porque prácticamente todos los grupos que componen la cesta de la compra contribuyeron a la relajación de los precios durante el mes de enero.

De nuevo, la estabilización del petróleo en una banda cercana a los 40 dólares por barril ha permitido que los precios del Transporte se redujeran un 7,2% respecto a enero del año pasado, y un 0,8% sobre diciembre.

Por su parte, Alimentos y Bebidas no alcohólicas ha conseguido controlar las presiones inflacionistas experimentadas hace un año, moderando su tasa de crecimiento anual hasta el 1,4%, cifra anómalamente reducida.

A ello se añade el buen comportamiento de Vestido y Calzado, que muestra un abaratamiento del 1,9% en comparación con el mismo mes de 2007 -y un 15,8% respecto a diciembre-, sin duda influido por el adelanto del periodo de rebajas al día 2 de enero.

Por su parte, los gastos asociados a Vivienda –excluyendo el precio de los inmuebles- continúan gravando sobremanera a hogares y empresas, constituyéndose como el grupo más inflacionista, con una variación anual del 6,7% -seis décimas menos que un mes antes-.

En este panorama reclama especial atención la inflación subyacente, un indicador que separa el componente más volátil –alimentos frescos y productos energéticos- del IPC general. En este sentido, se observa que el núcleo subyacente del IPC presenta en Murcia una tasa de crecimiento anual del 1,7% (2% en media nacional), muy cercana al objetivo del Banco Central Europeo (2%), con una reducción considerable desde agosto (3,3%).

Puede concluirse que, si bien la mayoría de bienes y servicios presentan un patrón de moderación de precios, circunstancia habitual en periodos de crisis económica como la actual, es la caída del precio del petróleo la que explica la intensa reducción de la inflación (hasta el 0,4%). Por lo tanto, hay que señalar que el riesgo de deflación permanece todavía muy lejano e improbable.

Esto no significa que los precios no caigan de forma puntual en algún momento de 2009 –es probable que esto suceda en próximos meses- pero ello no puede catalogarse como deflación. No en vano dicha caída no se producirá por cuestiones estructurales, sino por un abaratamiento generalizado de las materias primas, especialmente el petróleo, después de que éstas alcanzaran máximos históricos el verano pasado.

En definitiva, hay que valorar muy positivamente la fuerte moderación que experimentan los precios, por cuanto supone un alivio relevante para empresas y familias.