Murcia, 9 feb (EFE).- Unas 30.000 personas mayores de 18 años de la Región padecen Trastorno Límite de Personalidad (TLP) en la Región, mientras que en el caso de los menores, el 30 por ciento de ellos, diagnosticados de hiperactividad, acaban desarrollando esta enfermedad.
El TLP es un patrón persistente de inestabilidad en las relaciones interpersonales, el afecto y la autoimagen, con un escaso control de los impulsos, que genera desadaptación social, ocupacional y funcional, y que se asocia a elevadas tasas de comportamientos autodestructivos como tentativas de suicidio.
Según explicó hoy la directora de la Asociación de Ayuda e Investigación del TLP en la Región (ARMAI-TLP), Iluminada Ramos, esta patología, que sólo puede diagnosticarse a partir de los 18 años, suele manifestarse durante la adolescencia y tiene un periodo de "incubación" de entre cinco y díez años.
Ramos presentó, junto al consejero de Política Social, Joaquín Bascuñana, y el presidente de esta asociación, José Castillo, esta asociación, que el pasado 1 de enero se constituyó en fundación y que hoy ha recibido una subvención de la Administración regional de 80.000 euros.
La directora de ARMAI destacó que el 70 por ciento de los enfermos de TLP ha sufrido experiencias traumáticas o abusos en su infancia, aunque señaló que en el 50 por ciento de los casos suele tener un origen genético.
Añadió que el 70 por ciento de los menores, de entre 13 y 18 años, con trastornos de conducta puede desarrollar esta patología si no se le trata, por lo que aconsejó a los familiares que, en el momento en el que detecten en los adolescentes conductas poco sociables, "los pongan en manos de profesionales".
Entre esas conductas citó la mala adaptación social y escolar, comportamientos antinormativos, déficit en la regulación de los afectos, elevada impulsividad, tentativas de suicidio repetidas y depresiones graves, así como agresividad acusada.
En este sentido comentó que ARMAI cuenta con diversos programas, en los que se presta asistencia a enfermos y familiares como terapias individuales o de grupo, orientación y acción laboral, cursos de formación, entre ellos sobre cómo afrontar el estrés o cómo evitar la depresión, y atención psiquiátrica.
Actualmente, esta organización, creada en 2008, atiende a 45 familias, 25 de ellas para tratamiento de menores y el resto de adultos, y según Iluminada Ramos, es necesaria la implicación de toda la sociedad en esta patología, ya que no existen muchas investigaciones a este respecto.
Señaló que, por ello, ARMAI ha puesto en marcha un programa de investigación, dirigido por un psicólogo y un psiquiatra, que se centrará en diagnósticos, así como en tratamientos.
Por su parte, Joaquín Bascuñana destacó la importancia del trabajo que realizan asociaciones como ARMAI, máxime cuando, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el dos por ciento de la población mundial padece esta patología, que en España afecta a un millón de personas.EFE