La directora general de Ordenación Académica, Aurora Fernández, abrió hoy unas jornadas de trabajo destinadas a los centros educativos de la Región que desarrollan el Plan de Programas de Refuerzo, Orientación y Apoyo (PROA), un proyecto de cooperación territorial entre el Ministerio de Educación y Ciencia y las comunidades autónomas que pretende abordar las necesidades asociadas al entorno sociocultural del alumnado mediante un conjunto de programas de apoyo a los centros educativos.

El PROA, del que se benefician unos 1.500 escolares en la Región, está dirigido a alumnos de 5º y 6º de Educación Primaria, así como a los de 1º, 2º y 3º de Secundaria, alumnos que asisten a clase cuatro horas semanales, fuera del horario escolar, distribuidas en dos tardes.

La Consejería de Educación, Ciencia e Investigación desarrolla este Plan en la Región a través de tres programas que se pusieron en práctica durante el curso 2005-2006 en 24 centros públicos y se incrementaron hasta 46 en el curso pasado. En la actualidad los programas se están realizando en 100 centros públicos educativos, de los cuales 52 participan en el Programa de Acompañamiento Escolar en centros de Educación Primaria, 26 en el de Acompañamiento Escolar en centros de Secundaria, y 22 en el Programa de Apoyo y Refuerzo a centros de Educación Secundaria. El presupuesto destinado al PROA, cofinanciado entre el Ministerio y la Consejería, es de 2.327.476 euros.

Los centros, que participan voluntariamente en estos programas, han sido seleccionados por contar con alumnado en situación de desventaja educativa, asociada a un entorno sociocultural deficitario. Además, se han considerado, entre otros aspectos, los resultados académicos, el porcentaje de alumnado extranjero y el entorno socioeconómico en el que se encuentren ubicados.

Los objetivos de los programas de acompañamiento escolar en Primaria y Secundaria son potenciar el aprendizaje y el rendimiento escolar de los alumnos, mediante la adquisición de hábitos de organización y constancia en el trabajo, el aliento al estudio, proponiéndoles formas de trabajo eficaces y la mejora en habilidades y actitudes asociadas a la lectura, que servirán para mejorar su integración social, en el grupo y en el centro, para facilitar la transición del colegio al instituto y para asentar conocimientos y destrezas de las áreas instrumentales. La metodología que se utiliza es activa, individualizada y participativa, con el fin de contribuir a reforzar los aprendizajes que no se alcanzan en clase y a revisar contenidos no suficientemente aprendidos de las áreas instrumentales básicas.

En cuanto al Programa de Apoyo y Refuerzo a centros de Educación Secundaria, pretende proporcionar a los centros algún apoyo que permita romper con la situación y que haga posible un replanteamiento de las estrategias que utilizan para atender a determinados alumnos, y aumentar así las expectativas de éxito escolar. Para ello, se interviene en los tres ámbitos que, según todos los estudios, inciden de manera importante en la capacidad de los centros para mejorar los resultados de todos sus alumnos y, en particular, de los alumnos en clara desventaja escolar. Estos tres ámbitos son: el centro, a través de cambios en su organización y funcionamiento, así como en los procedimientos y recursos con los que cuenta para organizar la respuesta educativa de todos sus alumnos; las familias, fundamentalmente en lo que atañe a su relación con el centro y el apoyo que se presta desde ellas a los alumnos; y el entorno del centro, incrementando la oferta de carácter educativo no escolar.