Enseñar la historia, no como una sucesión de fechas, nombres, lugares y batallas; sino a partir de temas transversales que permitan al alumnado de Enseñanza Secundaria y Bachillerato comprender los grandes acontecimientos y cambios vividos a lo largo de la historia. Este es el gran objetivo que tiene el proyecto europeo 'HistoryLab for European Civic Engagement', que dirige el profesor de la Facultad de Educación de la Universidad de Murcia Cosme J. Gómez. Lo innovador de este proyecto, que permitirá a docentes de estas etapas educativas disponer de materiales y recursos para poder diseñar sus temarios y actividades, ha llevado a Gómez, y al también profesor de la UMU Juan Ramón Moreno, a exponer sus propuestas en los European Innovation Days in History Educaticion, un encuentro de profesionales en la enseñanza de la Historia organizado por HISTOLAB, una iniciativa conjunta de la Unión Europea y el Consejo de Europa. En ese encuentro, especialistas de toda Europa plantearon sus experiencias de éxito y buenas prácticas para mejorar la enseñanza de esta asignatura esencial en los currículos de todos los países.
"Lo que nosotros planteamos es, por ejemplo, que a través de un tema transversal como pueden ser 'Viajes y viajeros' se desarrolle un contenido que incluya los movimientos de población desde la prehistoria, las rutas comerciales y su importancia cultural, los descubrimientos, las colonizaciones o las migraciones. Se trata de estudiar los grandes acontecimientos históricos con otro enfoque y teniendo en cuenta cuestiones de pensamiento y conciencia histórica", explica el profesor Cosme J. Gómez.
En el proyecto se han planteado diez temas transversales de la historia de Europa, se han recogido más de 3.000 recursos digitales en su web y 30 propuestas de enseñanza y aprendizaje partiendo de esas temáticas. 'Mundo rural y mundo urbano', 'Bajo un manto del terror', 'Perseguidos por la Justicia', 'Iglesias y religiones' o 'Vida cotidiana y desigualdad social' son algunas de las temáticas que proponen. Los investigadores que han participado en el proyecto creen que esta forma de enseñar la historia es la mejor manera de conseguir que los jóvenes aprendan y reflexionen sobre los conocimientos del pasado. "La finalidad última es dar una visión alternativa del pasado europeo que fomente en el alumnado un compromiso cívico con valores democráticos", apunta el profesor de la UMU.
"HistoryLab for European Civic Engagement" es un proyecto Erasmus + coordinado por el profesor Gómez. Además de la Universidad de Murcia, también participan Universidad de Porto, Universidad de Bolonia, Universidad de Ámsterdam, Universidad de Malmö, y Universidad de Helsinki.
Un libro guía con las propuestas para docentes
Junto con la difusión de los resultados de la iniciativa en foros como los European Innovation Days in History Educaticion y de la distribución de los materiales a través de la web ; las conclusiones del trabajo realizado por los investigadores participantes se han publicado en el libro 'Re-imagining the Teaching of European History. Promoting Civic Education and Historical Consciousness', de la prestigiosa editorial Routledge.
Este trabajo, con contribuciones de investigadores de 12 universidades de7 países diferentes (Italia, Portugal, Holanda, Suecia, Canadá, EE.UU. y España), incluye tanto capítulos teóricos como de estudios de caso. La primera parte del libro aborda temas como la enseñanza de la historia de la democracia en un mundo globalizado e interconectado, enfoques multiculturales y críticos, la enseñanza de narrativas incómodas del pasado, y enfoques basados en pensamiento histórico y el uso de recursos digitales. La segunda parte del libro presenta capítulos temáticos dedicados a la enseñanza de temas transversales en el currículo europeo como: violencia y conflicto armado, familia y desigualdad social, igualdad de género, revolución tecnológica, viajes y viajeros, poder y poderes, o mundo rural y mundo urbano; los temas trabajados en el proyecto de investigación coordinado por la UMU.
El objetivo último de este libro es promover una enseñanza crítica de la historia, un compromiso cívico, y el impulso de un cambio metodológico en la educación histórica. Está dirigido a investigadores y estudiantes de educación histórica, educación cívica y ciencias sociales, y formadores de docentes de historia.