El alcalde de Murcia, José Ballesta, junto a la concejal de Movilidad Sostenible y Juventud, Rebeca Pérez, el concejal de Desarrollo Sostenible y Huerta, Antonio Navarro, y el concejal de Cultura y Recuperación del Patrimonio, Jesús Pacheco, visitó esta mañana la Cárcel Vieja, donde los trabajos para la recuperación de este histórico inmueble, catalogado como Elemento Singular, avanzan a buen ritmo.
“El proyecto para la recuperación del edificio de la antigua Prisión Provincial es un Proyecto de Ciudad. Este histórico inmueble se abrirá como un espacio de referencia en el corazón de Murcia, con un entorno peatonal abierto a todos los murcianos, sin barreras y con actividad permanente”, destacó José Ballesta durante la visita, quien añadió que “ya se han liberado los espacios públicos que rodeaban al edificio de cabecera de la Cárcel Vieja, que han sido recuperados para todos los murcianos”.
Recientemente, las antiguas antiguas vallas metálicas que cercaban al edificio de cabecera de la Cárcel Vieja han sido retiradas y los muros exteriores que lo separaban del edificio principal han sido demolidos, liberando dichos espacios, que se convertirán en plazas y exteriores ajardinados abiertos a todos los ciudadanos.
La Cárcel Vieja se integra en la trama urbana de la ciudad
Todo el espacio que rodea al edificio de cabecera, que tiene una superficie de 1.322 metros cuadrados, ha quedado convertido en una zona peatonal, haciendo que este inmueble se transforme en un edificio completamente permeable y abierto a la ciudad, por donde los vecinos podrán transitar sin barreras arquitectónicas.
Los trabajos mencionados forman parte de la fase 1 del proyecto, que centra sus actuaciones en este edificio de acceso al complejo, en el que destaca la presencia de un blasón de la provincia de Murcia sobre la puerta de acceso.
Asimismo, se están creando tres nuevos accesos peatonales alrededor de dicho inmueble: uno desde la avenida General Primo de Rivera; otro desde la calle Torre de la Marquesa, a través de la plaza que habilitará en este entorno, y otro tercer acceso desde la nueva plaza generada junto al edificio de Correos.
El resultado del proyecto será un espacio abierto a la ciudad y respetuoso con la arquitectura existente, la memoria histórica y el entorno: el edificio quedará totalmente integrado en la trama urbana de Murcia. Esta actuación también pondrá en valor el inmueble, que hasta ahora se encontraba parcialmente oculto.
Las distintas salas de carácter social y cultural de la Cárcel Vieja comienzan a perfilarse
Los operarios también están actuando en la primera y segunda planta de la Cárcel Vieja, donde se están llevando a cabo trabajos estructurales, que darán paso a la pavimentación de los suelos, estructuras de particiones y trasdosados de yeso laminado, paquete de instalaciones, carpinterías de aluminio…
Finalmente, se ejecutarán pinturas, puertas de madera, sanitarios, equipamiento de climatización, mecanismos eléctricos y luminarias, logrando la colocación de las puertas y creación de las distintas salas de carácter social y cultural que darán forma a la Cárcel Vieja –sala de exposiciones, sala de conferencias, espacio para la memoria histórica, etc. –.
Tras retirar los residuos generados por la demolición de la tabiquería interior de la primera planta de este inmueble histórico, los operarios ejecutaron la cimentación de la estructura. En este sentido, los actuales muros de carga del forjado serán sustituidos por vigas metálicas que, una vez habilitadas, permitirán retirar el antiguo solado del pavimento de la planta primera, en el que se ejecutará de una capa de compresión con conectores para reforzar e incrementar la resistencia del forjado.
Rehabilitación de cornisas con piezas originales
Los trabajos actuales también se centran en la recuperación de las fachadas. Asimismo, ya ha comenzado la reconstrucción de las cornisas que estaban deterioradas con piezas que han sido recuperadas a lo largo de los meses anteriores, manteniendo los materiales originales. En los espacios dañados por el tiempo o que presentan desprendimientos también se están recolocando piezas originales de la Cárcel Vieja.
Además, se han retirado los elementos que con el paso del tiempo se habían acumulado en las fachadas y que no eran originaros de las mismas, respetando el material original. Para ello, se han empleado cinceles manuales, los cuales no transmiten vibraciones que puedan debilitar el soporte existente.
Por su parte, para la eliminación de residuos plásticos, se están empleando elementos cortantes, punzones y pinzas de tracción, en lugar de disolventes químicos que puedan manchar dicho soporte.
Asimismo, se está llevando a cabo una limpieza general profunda para la eliminación de hongos, bacterias, enmugrecidos y enraizamientos –las plantas ancladas a la superficie se extraerán manualmente–. A finales de febrero, las fachadas habrán quedado completamente recuperadas.
De forma paralela, los operarios han habilitado todas las conexiones a los servicios de abastecimiento de agua, saneamiento, alcantarillado y electricidad, de las que no disponía este histórico inmueble.
Siguiente hito: la ejecución de las cubiertas de la Cárcel Vieja
También se están llevando a cabo pruebas para definir las piezas que se colocarán en las aceras y en parte del exterior del edificio cabecera, las cuales estarán también compuestas por piedras de los muros del propio inmueble. Próximamente comenzará la ejecución de las cubiertas, en la que se incorporarán las tejas originales recuperadas previamente. Esta actuación se prolongará desde mediados de marzo hasta mediados de abril.
Desde que comenzaron los trabajos el pasado 1 de junio, se han retirado las tejas de la cubierta que se encontraban en mal estado, desbrozado el terreno e iniciado los trabajos de limpieza en la fachada del edifico, entre otras actuaciones. En su conjunto, se está haciendo acopio del material extraído, puesto que será reutilizado dentro de la mejora del propio inmueble.
40 años clausurado
El edificio de la antigua Prisión Provincial de Murcia, que permanece cerrado desde hace 40 años, se caracteriza por su disposición arquitectónica en planta de cruz, creando un conjunto de estancias separadas y patios ajardinados. Fue construido a principios del siglo XX, inaugurado en junio de 1929 y cerrado en 1981.
Conservación de las antiguas torres
Tanto el ala derecha como el ala izquierda del edificio, que actualmente quedan divididas, estarán conectadas mediante un módulo acristalado situado en la fachada trasera del edificio, de manera que no cambie la percepción de la fachada principal.
Se mantendrán las antiguas torres de vigilancia y el muro perimetral exterior noreste (colindante con Correos). En estos perímetros se instalará una celosía de perfiles metálicos y espaciado variable, buscando la permeabilidad total de los patios con la ciudad y una mayor sensación de amplitud en el entorno urbano que revele el edificio al ciudadano.