"Que me vigilen. No hay problema. Yo tengo mis objetivos y no voy a dejar de luchar para estar lo más arriba posible".
Así de concisa y clara se muestra la marchadora María Pérez, estudiante del Grado en Educación Infantil de la UCAM, que competirá en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 en la prueba de 20 kilómetros marcha.
Tras ganar la medalla de oro en el Campeonato de Europa en Berlín 2018 se ha convertido en una de las referencias de esta prueba y por ello sus rivales la tendrán bien vigilada, algo que no le supone ningún problema.
Mientras llega la cita olímpica, la deportista no descuida su formación académica: "Tengo la suerte de estudiar en esta universidad que nos permite mucha flexibilidad a los deportistas y doy las gracias por pertenecer a esta gran familia".
Precisamente por esa labor de la UCAM de adaptarse a los calendarios y horarios de los deportistas, este año puede centrarse aún más en Tokio: "El objetivo es llegar lo más entera posible.
El año pasado terminamos muy tarde las competiciones y el cuerpo pide un poco de descanso. Además, habrá que tener en cuenta que en las semanas previas a la carrera habrá mucha tensión y tendré que saber gestionarla".