El Ayuntamiento de Murcia, gracias a la labor que realiza la concejalía de Juventud y Cooperación al Desarrollo que dirige Rebeca Pérez, colabora con la Fundación Mainel con más de 5.000 euros destinados a contribuir a la reducción de las tasas de mortalidad materna infantil y la desnutrición crónica en Guatemala.
El proyecto propone la formación y actualización de Promotoras Voluntarias en Salud, con especialidad en nutrición y salud materna infantil, como un medio para la prevención de enfermedades. La acción está focalizada en la capacitación y sensibilización en comunidades rurales, consejería y acompañamiento a familias con necesidades concretas, referencia oportuna en casos específicos y el acompañamiento en la recuperación nutricional de niños/as y madres.
"El proyecto se lleva a cabo en los departamentos de Totonicapán en los municipios de San Cristóbal Totonicapán, Totonicapán, San Francisco el Alto y Momostenango. También en el departamento de Quetzaltenango, en los municipios de Quetzaltenango, San Juan Ostuncalco, San Martín Chile Verde y San Miguel Siguilá", ha explicado la concejala de Cooperación.
Unas acciones dirigidas a madres de familia, niños/as desnutridos o malnutridos y madres en gestación. Principal atención de la desnutrición en niños de 0 a 5 años, así como la supervisión, ayuda y complemento nutricional a mujeres embarazadas. En total se atenderán de manera directa a 275 beneficiarios.
La figura de las Voluntarias en Salud es muy importante en las áreas rurales, dado que las poblaciones suelen estar alejadas de los servicios de atención médica. Con la formación recibida, las Voluntarias son capaces de diagnosticar los síntomas de las enfermedades comunes (respiratorias, intestinales, infecciosas, etc.) y están en condiciones de señalar cuál es el tratamiento a seguir o, en caso de necesidad, derivar la visita a un profesional médico.
"Hay que recordar que Guatemala sigue teniendo la tasa más alta de desnutrición crónica infantil en América Latina y el Caribe y una de las más altas del mundo. La desnutrición crónica entre la niñez menor de cinco años de edad llegó a 49,8%, pero este dato es mayor al suponer un 89% en algunas zonas indígenas. Esta alta tasa tiene un impacto directo sobre la mortalidad infantil, así como en el desarrollo intelectual y físico de la niñez", ha destacado Rebeca Pérez.
Resultados
Hasta el momento se ha logrado el acompañamiento en el proceso de recuperación nutricional de 112 madres embarazadas y 24 niños y niñas, quienes han comenzado a ser beneficiados con dotación de suplementos nutricionales que han permitido que su estado de salud mejore y se refleje en el aumento de peso y disminución de enfermedades durante estos meses.
Además las familias reciben un control clínico mensual, con el cual se identifican cambios y motiva a las madres de los niños/as y las embarazadas a continuar con una dieta balanceada con los productos que tienen al alcance dentro de la comunidad, concienciándoles sobre la importancia de llevar una dieta sana y seguir los hábitos higiénicos para un correcto desarrollo personal y familiar.