El Pleno municipal ha aprobado la moción conjunta gracias a la cual pone de manifiesto el reconocimiento institucional y público del Ayuntamiento de Murcia hacia los deportados en los campos de exterminio entre 1940 y 1945.
Así, el texto aprobado incluye la colocación de un monolito en una calle o plaza pública en la memoria de las víctimas y el homenaje personal del Ayuntamiento a Francisco Griéguez Pina, originario del municipio, que nació en 1918 y que "aún recuerda con tristeza y dolor los acontecimientos sucedidos, que tiñeron de desesperanza, represión y amenaza de muerte los que deberían haber sido los años más felices de su vida. Cayó, junto a otros murcianos y deportados de otros países, en las garras más violentas del hombre y fue víctima de la máquina de exterminio más horrorosa de la historia".
El Alcalde ha agradecido a los investigadores Víctor Peñalver, Rufino Garrido, José Luis López Mesa y José Sánchez, entre otros, el trabajo realizado.
La moción añade que "es justo y razonable, por tanto, que esta Corporación Municipal, como representantes legítimos de los ciudadanos de Murcia, manifieste públicamente la admiración y agradecimiento hacia quienes pusieron en riesgo sus propias vidas para defender la libertad".
"Murcia debe homenajear a quienes soportaron un sufrimiento extremo, terminando, los menos, en libertad, mientras que la mayoría pagaron con sus vidas. Las víctimas son de todos y Murcia desea manifestar nuestro apoyo y solidaridad con los afectados y sus familias", concluye el texto aprobado.