AHORA MURCIA lamenta que Ballesta haya perdido hoy una gran ocasión para hacer un diagnóstico realista de la situación del municipio, "y que en lugar de esto, haya optado como siempre por vendernos a todos una Murcia virtual e inexistente, basada en anuncios, propaganda y mega proyectos". Frente a esta actitud del alcalde, la portavoz de Ahora Murcia, Alicia Morales, ha señalado que el papel de la formación municipalista "es decirle al emperador que va desnudo, mostrándole la realidad del municipio y las dificultades que viven en su día a día una parte importante de los murcianos".

La edil ha señalado que el rol de su grupo ha sido "hacer visible lo que está invisibilizado por el equipo de Gobierno, porque no corresponde a esa Murcia virtual que tratan de vendernos siempre, y también, cómo no, en el Debate sobre el Estado del Municipio celebrado hoy". Morales ha destacado que "si hablamos de la Murcia real, la que tiene que ver con la vida diaria de los murcianos y murcianas, tenemos que hablar de políticas sociales, porque los datos de nuestro municipio señalan que hay muchas familias que tienen dificultades para llegar a final de mes, para conseguir plazas en guarderías, para acceder a los libros del colegio de sus hijos o al cuidado de sus mayores. Hay que recordar que somos junto con Ceuta la capital de provincia con mayor tasa de población en riesgo de pobreza, y que a pesar de ello destinamos un porcentaje del presupuesto a servicios sociales mucho menor que otras ciudades".

La portavoz de Ahora Murcia ha afirmado que otros graves problemas del municipio son "el estado de los servicios públicos del municipio; el transporte público, especialmente entre ciudad y pedanías; la gestión opaca e ineficiente del Ayuntamiento y su personal; la falta de un plan de alquiler de vivienda; la necesidad de IBI más justo; las deficiencias en colegios públicos e infraestructuras sanitarias; la ausencia de una política cultural; el deterioro del comercio local en favor de las grandes superficies y sus promotores...".

Ante todas estas deficiencias, Morales ha subraya la necesidad de "hacer un diagnóstico realista, ver lo que hace falta y establecer las prioridades en la inversión", a la vez que ha recordado dos de las grandes 'marcas de la casa' del PP municipal, "el urbanismo, en el que Ahora Murcia ha tenido que frenarle los pies con el Plan Fuensanta o los planes de Cabezo de Torres y Puente Tocinos, entre otros, por ser insostenibles e ilegales" y "la corrupción, de la cual el Consistorio no ha limpiado la casa, pues seguimos con la misma estructura y con altos cargos imputados de la época de Cámara".

La portavoz también se ha referido al AVE, "cuya llegada sin soterrar supone un muro en el sur de la ciudad que va a diferenciar todavía más ambas partes del municipio, el norte y el sur". Morales se ha referido a la llegada de la alta velocidad a Murcia como "un sainete interminable repleto de promesas y medias verdades", y ha animado a Ballesta a que visite de una vez San Pío o Santiago el Mayor, exigiéndole que trabaje para garantizar la llegada del AVE soterrado.

Morales ha subrayado que 15 meses después del pleno de investidura, "Murcia sigue siendo un municipio estancado en los temas esenciales: transporte, empleo, transparencia, fomento del pequeño tejido empresarial y comercial local, descentralización, modernización de la gestión pública, huerta y patrimonio, AVE, política cultural, servicios sociales...".

Para la concejala de Ahora Murcia, "los murcianos y las murcianas no tienen hoy una vida más fácil porque Ballesta haya lanzado una campaña sobre las 'smart cities' o porque haga un brindis al sol con el proyecto Murcia Río, ni se van a arreglar los problemas de nuestros pequeños comercios locales porque ponga alfombras rojas en las calles del centro".

La portavoz no ha dudado en señalar que el PP municipal "está inflando una burbuja propagandística igual que inflaron una burbuja inmobiliaria, y ya tenemos todos la experiencia de lo que pasa con las burbujas; nos estallan y acabamos pagando los de siempre. Ballesta no gestiona una ciudad, la disfraza. Y no va a pasar a la historia como un alcalde que gobernó su ciudad, sino como el alcalde que convirtió el ayuntamiento en una maquinaria de publicidad.

Morales ha afirmado que "ya pasó el tiempo de ciudades basadas en proyectos faraónicos que enriquecen a unos pocos y acaban empobreciendo a toda la ciudad. El modelo de Ballesta es el que tuvieron Gallardón, Botella, Barberá o Cámara, un modelo caduco y que además ha conllevado problemas a esos alcaldes".

Ha recordado, además, la predilección del PP municipal por las empresas privadas, "como Ferrovial, AGBAR, la UCAM o CESPA, que acaban siendo las beneficiadas por los grandes proyectos y por las privatizaciones. Pero un político tiene que elegir: apostar por un modelo de ciudad que le haga la vida más fácil a la gente o apostar por un modelo basado en superproyectos, que muchas veces, además, acaban siendo proyectos fallidos".

Ante todo ello, Morales ha pedido a Ballesta que ponga en práctica "otras políticas, políticas que funcionan mejor, políticas de sentido común, que cualquiera puede ver que son necesarias, por son las que resuelven los problemas reales de los ciudadanos y hacen más fácil su vida cotidiana".