2.292 personas han presentado su instancia en el Ayuntamiento para concurrir a la oposición convocada para cubrir 30 plazas del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento. Según las previsiones, los exámenes comenzarán a finales de año.
El proceso selectivo constará de distintas fases. En primer lugar, la oposición, que consistirá en la realización de un cuestionario de 100 preguntas tipo test y de cinco pruebas de aptitud física (prueba combinada; de velocidad 100 metros; de resistencia de 1.500 metros, de natación de 50 metros y de inmersión de 25 metros.
También tendrán que superar unas pruebas de aptitud físico-profesional en las que se acredite la tolerancia al vértigo y a la claustrofobia y la capacidad de velocidad, resistencia y agilidad con transporte de implementos.
Por último, un equipo psicológico realizará las pruebas de aptitud psicotécnica con el fin de determinar la personalidad y aptitudes del aspirante para el desempeño del puesto de bombero, y una entrevista personal para verificar que reúne las condiciones necesarias para el normal desempeño del puesto de trabajo.
Por otra parte, en cualquier momento del desarrollo de las pruebas físicas, el tribunal podrá convocar a aquellos aspirantes que considere para la realización de un control de dopaje mediante la recogida de una muestra de orina.
Asimismo, los aspirantes que superen estas pruebas tendrán que participar en un curso de formación y un periodo en prácticas.