El próximo jueves, a las 21 horas, el Teatro Circo Murcia acogerá el espectáculo ‘Il n'est pas encore minuit' de la compañía francesa XY, toda una creación colectiva en la que participarán 22 acróbatas, uniendo así las bondades de la danza y el circo, y en cuya creación ha participado el coreógrafo Loïc Touzé.
El nuevo espectáculo del circo XY, Il n'est pas encore minuit, sobrepasa los límites imaginables de una persona de a pie respecto a la disciplina circense de las acrobacias de portés y banquinas, sonsacando exclamaciones al unísono de un público entregado y fascinado.
Las posibilidades corporales, técnicas, artísticas y emocionales de la compañía francesa XY van mucho más allá del "más difícil todavía" que ha caracterizado el circo clásico y sigue caracterizando el contemporáneo. Dos estilos completamente diferentes con un punto en común, el riesgo.
Esta creación fue estrenada por la compañía XY en la Bienal de Danza de Lyon, tras cuatro años de giras. En su estreno, ampliaron el número de acróbatas de 17 a 22, renovaron la mitad del elenco y le transmitieron sus principios a los más jóvenes, con el objetivo de llevar el peso del espectáculo a partes iguales.
Así, llevaron sus acrobacias a un nuevo nivel, con volteretas más difñiciles y con la creación de formas geométricas más complejas por caóticas. No obstante, ellos fueron los que revolucionaron el paisaje del circo en 2009 con torres de varios pisos de chicos y chicas elevándose hasta el cielo.
Tras ‘Le Grand C' (2009), con éxito de público, este nuevo espectáculo Il n'est pas encore minuit, es una nueva demostración de las posibilidades de su técnica acrobática, cuya especialidad es el porté acrobático, una técnica peligrosa que exige un porteador fuerte (100 kilos de media) para lanzar al aire, cargando con todo el peso en sus brazos o sosteniendo sobre sus hombros a un acróbata ligero (50 kilos).
De esta manera, Il n'est pas encore minuit va más allá del espectáculo de circo, esbozando su potencial en la escritura de los cuerpos de los acróbatas en el espacio, así como en el esboce de las desviaciones (intervenciones durante una figura para cambiar su trayectoria), derivando así hacia la danza.