José Antonio Sotomayor afirma que el equipo de Gobierno ha aprobado en el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas "una norma que no da respuesta a las demandas de los vecinos ni persigue la trata ni la explotación, sino a las personas que son genuinas víctimas de la misma"
El concejal de Unión Progreso y Democracia en el Ayuntamiento de Murcia, José Antonio Sotomayor, afirma que el equipo de Gobierno ha aprobado en el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas "una ordenanza que no da respuesta a las demandas de los vecinos del municipio donde la prostitución se ha convertido en un motivo de constante preocupación", especialmente en algunas calles del barrio de El Carmen.
Como explica el edil, "la nueva norma municipal es una total incongruencia que no va encaminada a la raíz del problema, ya que no persigue la lacra de la explotación sexual y la trata de seres humanos, sino a las personas que son genuinas víctimas de la misma".
Un texto que "al mismo tiempo sanciona a las personas que se ven obligadas a ejercer la prostitución y dice querer luchar contra la explotación sexual es un contrasentido", continua Sotomayor.
Esta nueva ordenanza debería sancionar la demanda de servicios sexuales y el favorecimiento, promoción o facilitación de estas conductas, acciones ejercidas desde la figura del cliente "que debe ser sancionado desde el primer momento". Para UPyD Murcia, en lugar de eso, sancionar a las personas que ejercen la prostitución ocasionará una "revictimización" de las mismas.
En opinión de Sotomayor, las multas no conseguirán el deseado efecto disuasorio ya que la práctica totalidad son personas insolventes, generando un trabajo administrativo "totalmente improductivo".
La ordenanza municipal no recoge tampoco la puesta en marcha de un Plan Integral contra la Explotación Sexual, tal y como pedía UPyD en las enmiendas que planteó al grupo popular para poder apoyarla.
"La sola respuesta policial o una ordenanza en sí misma no es suficiente", ya que debe ir acompañada de acciones transversales y multidisciplinares en educación tanto sexual como en igualdad, sensibilización e intervención social, "posibilitando opciones de recuperación personal y sociolaboral a las personas que deseen abandonar la prostitución, contando con un presupuesto propio suficiente".
"Creemos que lamentablemente esta ordenanza no tendrá efecto disuasorio alguno, será inútil y contraproducente, quedando en un mero recurso estético".