La edil Andrea Garries denuncia que una familia de tres miembros que vive en pedanías pagará una media de 1.000 euros en concepto de IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) y sello del coche al Ayuntamiento, mientras éste les da a cambio la miserable cifra de 45 euros de media en inversión por persona.
Una prueba evidente –lamenta Garries- de la austeridad sin límites del PP municipal que para cuadrar sus cuentas y obtener superávit recorta las inversiones destinadas a pedanías generando más paro, más abandono y mayor discriminación en las pedanías.
A lo largo de estos 18 años de gobierno del PP, las 54 pedanías del municipio, que representa un 70% del territorio y donde reside el 65% del total de la población de Murcia, siguen asfixiadas económicamente, sin inversiones de ningún tipo.
Así mismo, continúa la concejal del PSOE, los vecinos de El Palmar, Sangonera La Verde, Churra, La Alberca, Beniaján y Cabezo de Torres –algunas de las pedanías más grandes en cuanto a población- se encuentran incluso por debajo del presupuesto medio antes mencionado (45 euros).
De los 84 millones de euros prometidos por el PP en el presupuesto 2012 para inversiones, la realidad es que solo ha invertido 15 millones de euros", informa Garries, quien ha solicitado a la concejal de Hacienda, Isabel Martínez Conesa, un desglose pormenorizado de dichas inversiones porque "mucho nos tememos que la mayoría de ellas se han llevado a cabo fuera de las pedanías".
"El Ayuntamiento no puede alardear de superávit cuando deja de ejecutar la mayor parte de las inversiones siendo éstas las que generan empleo", finaliza.