Los principios básicos que deben seguir las ciudades para implantar de forma mayoritaria la movilidad eléctrica se conocerán a partir de ahora como el “Acuerdo de Murcia”. Así lo han acordado hoy los miembros de la Red Civitas España y Portugal, reunidos ayer y hoy en el Ayuntamiento en la celebración de su III Foro, cuya inauguración ha estado presidida por la Concejal de Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá.
El Acuerdo de Murcia sostiene la necesidad de impulsar el uso del automóvil eléctrico y la implantación de la movilidad eléctrica en las ciudades. Así mismo, se pretende que las empresas proveedoras ofrezcan vehículos a un precio competitivo, tanto a particulares como a administraciones, así como disponer de ayudas a la financiación de las infraestructuras locales que se deben implementar, procedentes tanto de los gobiernos estatales como de la Comisión Europea, a través de los Fondos Estructurales y de Cohesión o nuevas convocatorias para abordar asuntos relacionados con la movilidad urbana eléctrica. Es la primera vez que se alcanza un acuerdo de esta magnitud.
La Red reúne a 30 municipios de ambos países preocupados por la movilidad sostenible, el ahorro energético y la reducción de emisiones. La forma de conseguirlo será a través de la mejora de la salud y de la calidad del aire y la reducción del impacto en el cambio climático y del coste del transporte y de la movilidad. La Red está formada por ciudades como Madrid, Lisboa, Barcelona, Sevilla, Zaragoza, Oporto, Vitoria, Santander, Bilbao, Girona y Murcia.
Las ciudades integradas en la red mantienen un compromiso político y técnico para introducir ambiciosas estrategias respecto al cambio hacia la liberación de los vehículos convencionales y el impulso de la movilidad eléctrica.
El objetivo común es el logro de los estándares de la calidad del aire y la disminución de las emisiones de CO2, sabiendo que el transporte urbano contribuye al 70% de los contaminantes y el transporte europeo por carretera el 40% de las emisiones de CO2, así como los ambiciosos objetivos definidos por el Libro Blanco de la Comisión Europea para liberar a las ciudades de los vehículos convencionales en el año 2050 y de la circulación de mercancías en 2030 libre de CO2.
“Para lograr este objetivo –ha recordado Martínez-Cachá- las ciudades estamos decididas a apoyar las políticas sostenibles de promoción de la movilidad eléctrica, el intercambio de experiencias entre ciudades para replicar las mejores prácticas, el uso eficiente e inteligente de los recursos (siguiendo la filosofía de las Smart Cities) e intentando introducir en nuestras políticas locales las políticas de movilidad urbana eléctrica sostenible siempre que nos sea posible”.
“Las ciudades somos responsables de responder a estos objetivos en línea con el principio de subsidiariedad”, ha asegurado Adela Martínez-Cachá, razón por la cual adquiere una gran importancia la colaboración y el intercambio de conocimientos con otras ciudades, en este caso sobre la movilidad eléctrica en las ciudades de España y Portugal a través de la Red Civinet.
En este sentido, la edil de Medio Ambiente considera –como recoge el Acuerdo de Murcia- que “sólo a través del trabajo: vertical (con la Comisión Europea), horizontal (con otras ciudades), y lateralmente (internamente, tanto técnicos como políticos, y públicamente, con los ciudadanos) lograremos una movilidad eléctrica urbana sostenible”.
Un futuro sostenible
El Ayuntamiento de Murcia, a través de su Agencia Local de Energía y Cambio Climático, dedica una atención singular a la mejora de la movilidad y el impulso de medidas de eficiencia energética, “que constituyen dos áreas prioritarias en las que los ayuntamientos podemos poner en marcha actuaciones para encaminar nuestras ciudades hacia un futuro sostenible”.
Entre las actuaciones que ya se están llevando a cabo en materia de movilidad y transporte público eficiente, destaca, por ejemplo, el uso de biodiesel en la flota de autobuses, el impulso de la red de vías ciclables, la implantación del tranvía, el plan de movilidad urbana sostenible, las subvenciones municipales a los ciudadanos y empresas para la adquisición de vehículos eléctricos o que utilicen combustibles alternativos o los descuentos fiscales en su matriculación.
Todas estas actuaciones remarcan la importancia de la movilidad como campo clave de actuación de la Estrategia de Lucha contra el Cambio climático y el Plan de Acción de Energía Sostenible que el equipo de gobierno municipal está impulsando con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero un 20% para 2020.