Agentes de la Policía Nacional adscritos a la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación de Murcia, con la colaboración de la Policía Local de Torrepacheco, han desarticulado un grupo organizado que se dedicaba a introducir en nuestro país para su explotación sexual a mujeres extranjeras en situación irregular.
Durante más de un año los investigadores siguieron los pasos de los miembros de esta organización criminal, que captaba a jóvenes extranjeras en sus países de origen, principalmente en Sudamérica. Así, se pudo saber que personas vinculadas a esta organización contactaban con jóvenes en situación económica precaria a quienes se les ofrecía trabajo en España y se les facilitaba dinero para los desplazamientos y trámites necesarios. Una vez en nuestro país, los integrantes de la organización les exigían la entrega de determinadas cantidades de dinero en retribución de los gastos originados, cuyo importe se cuantificaba de forma unilateral y arbitraria por los miembros de la banda y que solían ser cantidades cercanas a los tres mil quinientos euros. Para conseguir este dinero, las jóvenes debían ejercer la prostitución bajo el criterio y la supervisión de un grupo de proxenetas que descontaban cantidades de esa deuda a cambio de los servicios prestados. En algunos casos los familiares de las jóvenes avalaban con sus propiedades la deuda que estas contraían con la organización, constituyendo este temor a la pérdida de los bienes de su familia un importante elemento de coacción utilizado para mantener la disciplina y la obediencia.
Con los datos obtenidos, el pasado día 25 de mayo se desarrolló una operación policial en un prostíbulo privado y un bar de Torre Pacheco, que se saldó con la detención de los cinco integrantes de la organización criminal y de otras cinco personas por infracción de la Ley de Extranjería.
Entre los miembros del grupo organizado se encuentran tres varones y dos mujeres, de edades comprendidas entre 31 y 54 años y de nacionalidades española y paraguaya, a quienes se les imputan los delitos de tráfico de seres humanos, contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, contra el derecho de los trabajadores y relativos a la prostitución. Los detenidos son el propietario de los locales, la encargada de los mismos y otras tres personas dedicadas al control, vigilancia y traslados de los locales y de las jóvenes.
Los cinco detenidos por infracción de la Ley de Extranjería, a quienes se les ha incoado el correspondiente expediente de expulsión, son tres mujeres y dos hombres, de nacionalidades ecuatoriana, marroquí y paraguaya y de entre 23 y 31 años de edad.