Murcia, 12 ene (EFE).- El defensa del Real Murcia Sergio Fernández ha reconocido hoy que "no es momento de hablar, pues la afición ya se ha cansado de oirnos" y ha añadido que para sacar al equipo de los puestos de descenso a Segunda B el equipo tiene que "trabajar más y mejor".
El jugador grana ha hablado en rueda de prensa después del entrenamiento que ha llevado a cabo la plantilla en las instalaciones de Cobatillas y que ha estado marcado por la tensión entre algunos seguidores y los futbolistas, que fueron increpados por su mal rendimiento a lo largo de la temporada.
Uno de los jugadores, Álvaro Mejía, respondió desde el terreno de juego a una persona que puso en duda su profesionalidad.
Fernández se ha referido a ese incidente diciendo que "no hay que darle más importancia, aunque no es una situación fácil para nadie y desagradable para todo el mundo" y ha elogiado a la afición porque, según el defensa, "no hay ningún pero ni ningún reproche que hacerle a los seguidores, pues ellos están demostrando estar a la altura de una institución como el Murcia y nosotros, sin embargo, no estamos dando lo que se esperaba de nosotros".
"La gente ya se ha cansado de oirnos hablar y lo que espera es que consigamos victorias. Entiendo su decepción y no es momento de hablar sino de trabajar más y mejor y a partir de hoy nuestras miras tienen que centrarse en el futuro para salir de la situación en la que estamos", ha explicado.
Sergio Fernández, seguramente el jugador más reflexivo y coherente del Murcia, ha indicado que "es el momento de estar unidos y de ser más solidarios que nunca. Ningún equipo desciende en el mes de enero y tenemos plantilla para aspirar a algo más que la permanencia, pero está claro que algo no hemos hecho bien y tenemos que reflexionar y recapacitar. Nos entregaremos al máximo".
El central leonés, de 34 años y llegado al equipo murcianista el pasado verano procedente del Hércules de Alicante, hoy líder de Segunda, ha reconocido también que el entrenador, José González, "está en la misma situación que los jugadores y se le ve dolido por la situación del equipo y disgustado porque en el campo no se plasma el trabajo de la semana y porque la suerte nos está dando la espalda de la manera más cruel".