Murcia, 13 nov (EFE).- El Club Baloncesto Murcia, colista de la Liga ACB con una sola victoria conseguida en seis jornadas, visitará mañana al Meridiano Alicante, que es un rival directo por la salvación y al que tratará de ganar para no ver complicarse más su situación y la de su entrenador, Moncho Fernández.

El conjunto murciano, que el pasado sábado cayó por un rotundo marcador de 84-54 en la cancha del Unicaja de Málaga, podrá contar con todos sus jugadores, aunque durante la semana seis de ellos han arrastrado diversas molestias que les han impedido entrenar al ritmo que Fernández hubiese querido.

Los escoltas Pedro Robles, con un esguince de tobillo; y el lituano Tomas Delininkaitis, con un golpe en la ingle; el ala pívot estadounidense Chris Moss, con una tendinitis; y los pívots brasileños Paulao Prestes y Vitor Faverani, con un golpe en el antebrazo derecho y una fascitis plantar en un pie, respectivamente, están 'tocados' y, aunque todos ellos podrán ser alineados, Moncho Fernández ha lamentado su estado físico.

"Aunque al final lo que queda es que estos jugadores compiten el fin de semana también hay que entrenar para estar en un buen estado de forma y sobre todo para reforzar el colectivo y todas esas incidencias nos hacen mucho daño y no sólo en el aspecto físico, sino también en el táctico", ha dicho el técnico gallego.

Junto a los cinco jugadores mencionados formarán la expedición grana los bases José Antonio Marco Gaona y el serbio Milos Vujanic, los aleros Xavi Sánchez, el montenegrino Vlado Scepanovic y el estadounidense Roger Powell y los ala pívots Albert Moncasi y Óscar García.

El entrenador del CB Murcia, quien ha dicho que "en absoluto me siento cuestionado", ha reconocido que el que tendrá lugar en el Centro de Tecnificación de Alicante será "un partido importante, porque no venimos de la mejor racha posible y está claro que ahora mismo tenemos la necesidad de ganar".

Por ello, ha exigido esfuerzo a sus jugadores después del mal partido de Málaga y ha dejado claro que "se puede ganar o perder, pero hay formas de hacerlo y la competitividad no nos puede faltar nunca".

El equipo murciano, que suele vencer apenas dos o tres partidos como visitante por temporada desde que está en la Liga ACB, le tiene tomada la medida al cuadro alicantino, al que ha ganado en las dos visitas que le ha hecho. En la campaña 2003/2004 se impuso por 58-62 y en la 2006/2007 venció por 56-58.

En la vecina localidad habrá mañana más de 200 seguidores granas en las gradas para apoyar a los suyos en busca de una victoria muy necesaria para romper la mala dinámica del equipo y dar aire a su técnico. EFE