Murcia, 17 jun (EFE).- Dos de los agentes de la Policía Nacional que fueron arrollados por el conductor de un vehículo que se saltó un control de tipo rutinario en Murcia se recuperan de las heridas sufridas, aunque uno de ellos continúa de baja, han informado hoy fuentes de la Jefatura Superior de Policía.
En la madrugada del día 13, el conductor de un vehículo, IM.E.R, fue acusado y enviado a prisión por un presunto delito de atentado a agente de la autoridad y dos homicidios en grado de tentativa, al acelerar "bruscamente" su coche al encontrarse con un control policial en la calle Enrique Tierno Galván, de Murcia.
Los agentes le dieron el alto y resultaron heridos leves al tener que tirarse al suelo para esquivar el vehículo, que alcanzó a uno de ellos en una pierna.
Las diligencias previas reflejan que, en el intento de detener el vehículo, los agentes de policía hicieron uso de sus armas reglamentarias disparando a las ruedas del coche en fuga.
Según Fuentes de la Policía Nacional los impactos de bala alcanzaron el frontal y lateral del vehículo, en el que el detenido ocultaba varias prendas de vestir presuntamente procedentes de robos, así como una balanza de precisión con restos de cocaína, bajo el asiento del conductor.
La mismas fuentes han apuntado que, tras disparar la policía el hombre huyó hasta que fue alcanzado y detenido en una gran superficie de la zona, que ha facilitado una grabación de las cámaras de seguridad a los agentes para la instrucción de las diligencias.
El delegado del Gobierno en Murcia, Rafael González Tovar, informó hoy que se investiga al detenido, un hombre de 24 años vecino de Murcia y de origen ecuatoriano, que en el momento del suceso iba acompañado de un joven de 17 años, de su misma nacionalidad.
Además, el juez que llevó el caso no descarta que, una vez se hayan ampliados las diligencias y la instrucción, se realicen más pruebas o se imputen más cargos contra el acusado.
El hombre, que conducía un citroen xsara de color gris matriculado a su nombre, fue trasladado al hospital de la Arrixaca, donde según fuentes policiales el médico reconoció que tenía una herida en el pie pero que desconocía "si era de arma o producida por otras causas".
Según las mismas fuentes el detenido, que "estaba confuso y hablaba de forma atropellada" dijo que era una herida de bala, aunque han subrayado que deberá hacerse una valoración judicial para comprobar el origen de la misma. EFE