Alejandro Valverde fue cuarto en la séptima etapa del Critérium del Dauphiné Libéré, disputada hoy entre Briançon y Saint François Longchamp. El campeón de España sigue de líder en la clasificación general en vísperas de la última etapa que se concluirá mañana en Grenoble.
“Hoy era el día más difícil y lo hemos salvado. Estoy por supuesto muy contento, no puede ser de otra forma. La etapa ha sido durísima, con dos puertos de categoría especial y uno de primera para terminar. Los ataques han sido continuos desde la salida y al final se ha hecho un grupo de 25 corredores delante. He podido contar con el apoyo de todos mis compañeros de equipo, que una vez más realizaron un gran trabajo, para controlar la carrera en la parte inicial.
En la parte final nos encontramos los tres mismos favoritos juntos, Contador, Evans y yo. Evans ha arrancado diez-quince veces y cada vez a tope pero tenía fuerzas para contenerle.
He sufrido mucho, creo que como todos, y eso es normal en una etapa como esta. Sabía que Evans me iba a atacar por estar a solo 16 segundos. El no tenía otra solución que la de arrancar y arrancar para intentar descolgarme. Demostró en la crono que era muy fuerte y que la Dauphiné hubiera podido ser suya también.
Queda solo un día, que será mucho menos duro que hoy, pero habrá que ser muy atentos hasta el final. La última etapa no es decisiva porque el puerto está lejos de meta y si me Evans me ataca allí luego, con el gran equipo que tengo podremos organizarnos y pillarlos.
Quiero dar las gracias a la afición por su apoyo. El público francés es genial conmigo y espero ganar esta carrera también para ellos.”