Eibar (Guipúzcoa), 26 nov (EFE).- El Eibar vive una semana complicada después de haberse visto atrapado en los puestos de descenso, pero la plantilla azulgrana mantiene la serenidad y el centrocampista Nacho Insa sostiene que "si se gana al Murcia todo será diferente".
Un solitario triunfo en once jornadas ha llevado al fondo de la tabla a los guipuzcoanos, y aunque el 3-0 sufrido el sábado en Zaragoza "entraba dentro de lo normal", ahora las urgencias son mayores.
"Queremos ganar y si no lo conseguimos fuera tendremos que lograrlo en casa, venga quien venga", asevera el alicantino, consciente de la trascendencia de los tres puntos en juego tanto de cara a la clasificación como por la influencia que ello tendría para "coger confianza" en sí mismos.
Insa opina que "todo se verá con más optimismo" en cuanto llegue la ansiada victoria, y que no se puede dilatar más en el tiempo porque Ipurúa es su "fortín" y así han de ratificarlo, a pesar del traspié sufrido en su última comparecencia, frente a Las Palmas.
El ex futbolista del filial del Valencia comprende que la sucesión de malos resultados "da qué pensar" a los aficionados, preocupados por la trayectoria descendente del cuadro de Carlos Pouso, pero juzga imprescindible aislarse del entorno.
"Ya somos mayorcitos para saber que tenemos que apartarnos de todo ello, estar más tranquilos y con la mente despejada", apunta, asumida la necesidad de "estar a las duras y a las maduras".
El Murcia es el único equipo de la división de plata que todavía no ha puntuado a domicilio y el lógico deseo de Insa es "que siga así y no rompa la estadística", pero por encima de todo está el convencimiento de que habrán de saltar al campo dispuestos a "plantar cara" desde el pitido inicial.
Después de varias semanas ausente del equipo, debido a una lesión muscular, ya se encuentra recuperado y "bastante bien" en el aspecto físico, por lo que aguarda la oportunidad para reaparecer. EFE