Murcia va a completar su mapa de ruidos con la elaboración de la segunda fase de este estudio, que incluye la actualización de los mapas de 16 pedanías y la realización de los correspondientes a otras 38. Este capítulo incluye el establecimiento de una zonificación acústica en las zonas de estudio, el análisis del cumplimiento de los objetivos de calidad y de los límites fijados por la Ordenanza Municipal de Protección del Medio Ambiente.
Murcia ya cuenta con un valioso instrumento de gestión ambiental, como base para plantear actuaciones de lucha o prevención contra la contaminación acústica, como es el Mapa de Ruidos.
El Servicio de Protección Ambiental ha venido efectuando desde 1995 de forma continua mediciones de los niveles de ruido durante los periodos diurno y nocturno en las calles del municipio
de Murcia, para conocer los niveles de ruido a los que está sometida la población, según el protocolo de medida establecido en el Decreto regional 48/1998 de protección del medio ambiente contra el ruido, disponiendo de 569 medidas en periodo día y 331 en periodo noche.
El Ayuntamiento ha realizado el mapa estratégico de ruido de la zona de mayor densidad poblacional del municipio -el casco urbano de la ciudad de Murcia- ya que debido a la amplitud del término municipal y a la complejidad de los estudios y cálculos a realizar, ha sido necesario abordarlo por fases.
Los resultados obtenidos reflejan que el municipio, desde el punto de vista acústico, sigue la tónica de otras ciudades europeas de las mismas características en cuanto a la principal fuente causante de ruido y los niveles registrados.
Como corresponde a una ciudad con un importante desarrollo de servicios y comercios, motivado principalmente por ser capital de la región y el municipio de mayor población, el tráfico rodado es nuestra principal fuente de contaminación acústica. Es por tanto en las vías que soportan mayor densidad de vehículos donde se dan los niveles más altos de ruido.
Durante el día, el límite fijado por la normativa para zonas residenciales es de 65 dB(A). A nivel de fachada las calles donde se registran mayores niveles (superiores a 75 dB(A)) son escasas si comparamos con el total del viario del casco urbano. Éstas son algunos tramos concretos de la Ronda Oeste, y de la Gran Vía.
La mayor parte del casco urbano, que corresponde a la mayor extensión de la zona de estudio, se encuentra en niveles de ruido por debajo de los 65 dB(A), cumpliendo por tanto con lo establecido por la normativa.
En cuanto al periodo nocturno, los niveles de ruido sufren un considerable descenso a consecuencia de la disminución del tráfico en
este periodo. El límite fijado por la normativa es de 55 dB(A).