Pepa Millán, senadora de VOX por Andalucía, ha recordado que en la región "hay municipios con Hospitales que se han inaugurado hasta tres veces durante la época socialista".

«Las zonas rurales, sus habitantes y su economía están en el punto de mira de unas élites económicas y políticas progresistas que estigmatizan su modo de vida». Con esas palabras, la senadora de VOX Pepa Millán ha vuelto a denunciar el abandono de las zonas rurales de España, a las que ha calificado como, «España vaciada» por «los gobiernos del bipartidismo» y por el «el centralismo del estado de las autonomías en detrimento de la pluralidad de España».

La senadora ha recordado que «han sido muchos los Gobiernos que han pasado y que no han hecho nada por garantizar en estas zonas». Así, ha denunciado que hay zonas de España incomunicadas, cuyos habitantes sufren verdaderos problemas para acudir a un centro de salud, recibir suministros básicos o cuando padecen las inclemencias del temporal». También ha reprochado al bipartidismo que no hayan garantizado la Sanidad. Así, por ejemplo, en Andalucía «hay municipios con Hospitales que se han inaugurado hasta tres veces durante la época socialista». También se ha referido a la educación y al resto de servicios básicos, que son -ha recordado- «imprescindibles para el desarrollo de cualquier rincón de España y garantizar el arraigo poblacional».

Desarraigo

Así, durante la Comisión de Cultura y Deporte, la senadora de VOX también ha lamentado que «el caso de las bibliotecas es uno más de tantos servicios básicos que escasean o son prácticamente inexistentes en estas zonas que sufren el abandono de la Administración». La senadora Millán ha defendido que las  bibliotecas públicas son «un elemento de cohesión social y cultural  en la vida de estos municipios» y ha reclamado que se gestionen «de forma única para evitar los cambios de criterio en función de los distintos gobiernos».

Unas administraciones que «han puesto en marcha unas políticas que han desfavorecido el desarraigo en el mundo rural» de diferentes formas: fomentando  la competencia desleal de productos; criminalizando la forma de vida en las zonas rurales, o no haciendo nada para que los jóvenes se queden en ellas favoreciendo su éxodo a los núcleos urbanos».