La Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo - Segura volvió a aprobar los obligatorios 38 hm3 que obliga la ley en Nivel 2, una cifra que el Ministerio propone rebajar a 27 hm3, una rebaja que los ribereños consideran insuficiente. Además, informó de que las anunciadas obras de reparación en el embalse de La Bujeda no comenzarán hasta septiembre, con lo cual temen que la codicia levantina vacíe sus embalses en verano, cuando más lo necesitan
El mismo día que la Unión Europea anunciaba que no tocará una coma de la Directiva Marco del Agua, el Ministerio de Transición Ecológica volvió a traicionar los intereses del río Tajo y la comarca ribereña aprobando un nuevo trasvase de 38 hm3 y anunciando que las esperadas obras de La Bujeda no comenzaran hasta septiembre. El representante de la Confederación Hidrográfica del Tajo ni está, ni se le espera en defensa del río.
"Cuando quieran cortar, en septiembre, ya no quedará agua que llevarse porque planean hacer efectivos todos los trasvases pendientes durante los meses de julio y agosto, para no perder los derechos sobre esa agua", denuncia con amargura Francisco Pérez Torrecilla, representante de la Mancomunidad de Aguas de Municipios Colindantes de los Embalses de Entrepeñas y Buendía. "El Ministerio nos ha vuelto a dejar de lado y la CHT ha vuelto a actuar de mamporrera de la Confederación Hidrográfica del Segura".
Los Ribereños están cansados de las buenas palabras e intenciones de la ministra de Transición Ecológica, que hasta la fecha no ha actuado nunca en defensa del Tajo, cediendo siempre a las exigencias de los regantes. Mucho menos confían ya en el secretario de Medio Ambiente, Hugo Morán, que tampoco ha estado nunca a la altura. "Vivimos un momento crítico en el que tanto el Tajo como el Mar Menor necesitaban de políticos valientes, capaces de tomar decisiones en defensa del Medio Ambiente y del patrimonio de los españoles; pero la cacareada Transición Ecológica es un giro de 360°, fuegos artificiales y tiempo perdido", lamentan desde la asociación.
Los ribereños consideran insuficiente la disminución de 38 hm3 a 27 hm3 y creen que en Nivel 2 la decisión debería corresponder, como en Nivel 3, a criterios negociables, no a trasvases por defecto. "Que pregunten a los vecinos de Los Alcázares si ha llovido este año en la Región de Murcia, si les hace falta el agua, y qué opinión tienen de la agroindustria".
Especialmente críticos se muestran con la Confederación Hidrográfica del Tajo, cuyo representante en la comisión consideran "un agente al servicio de los intereses del Segura". Lamentan que quienes deberían ser los mayores defensores del río, guarden silencio ante sus enemigos y, en cambio, se muestren bravos siempre contra los alcaldes del Tajo.
No obstante, mientras el Gobierno de España continúa actuando negligentemente, el proceso en Europa continúa su curso y la Asociación ha elevado sus quejas hasta la ONU. "Llegaremos donde tengamos que llegar y consideramos a los actuales dirigentes del Ministerio igual de responsables que sus antecesores, porque tiempo han tenido de sobra para empezar a solucionarlo y han preferido ceder a las presiones del lobby de la agroindustria".
"No nos rendiremos nunca, no cesaremos jamás en nuestro empeño, porque como decimos en Castilla, cuanto más vieja la yesca y más duro el pedernal, más fácil se prenderá".