Critican la negativa del Gobierno Regional a elaborar un Plan de Ordenación Regional del sector, que racionalice su desarrollo e implantación de manera sostenible.
Ecologistas en Acción de la Región Murciana ha presentado alegaciones a los tres proyectos de plantas solares fotovoltaicas en el municipio de Mula, y otras tres limítrofes del municipio, en Campos del Río y Murcia, que se unen a otra instalación fotovoltaica existente de 1.000 hectáreas. Las alegaciones advierten de los impactos ambientales y sociales derivados de esta concentración de proyectos.
El municipio de Mula, es un ejemplo de este verdadero despropósito, donde ya está establecida la que es la segunda planta en tamaño de España con mil hectáreas (la primera está en Extremadura), y además hay proyectadas seis instalaciones más, tres plantas solares en el municipio y otras tres limítrofes con Mula, dos en Campos del Rio y una en Murcia, sin que se hayan evaluado en ningún momento los efectos sinérgicos y acumulativos de manera integral.
La organización ecologista considera necesario analizar con detalle, y de una manera cuantitativa, los efectos acumulativos o sinérgicos de la concentración de plantas solares fotovoltaicas y parques eólicos, en funcionamiento o en proyectos, así como con otras instalaciones como subestaciones, líneas eléctricas aéreas e infraestructuras lineales de transporte.
En los documentos de los proyectos no aparecen la descripción detallada de los efectos sinérgicos y acumulativos que pudieran tener sobre suelos, hábitats, determinadas especies de flora y fauna (en especial de especies amenazadas) o hábitats, afectados por estas instalaciones y sus infraestructuras.
El Ayuntamiento de Mula ha aprobado por unanimidad una declaración, en la que reclama a las administraciones públicas el regular, ordenar e integrar estas plantas con el entorno.
Ecologistas en Acción se muestra de acuerdo con la solicitud del Ayuntamiento a la Asamblea Regional para que apruebe las modificaciones legislativas necesarias para establecer un régimen urbanístico específico para las instalaciones fotovoltaicas no domésticas, con los objetivos de establecer límites a la implantación de plantas de producción de energías renovables; dotar de protección especial a zonas de alto valor agrícola, protección de yacimientos arqueológicos y espacios naturales; conservar las vías pecuarias, corredores ecológicos y conservación de caminos rurales, establecer distancias mínimas a los núcleos urbanos, diseñar estrategias de integración con el entorno y potenciar la naturalización de este tipo de instalaciones, así como establecer límites al tamaño y producción de cada planta[1].
Es urgente la elaboración de un Plan de Ordenación Regional que permitiría ordenar y establecer las zonas a priori más favorables para este tipo de instalaciones en la Región de Murcia, desde el punto de vista ambiental y de conectividad a las redes, identificando las zonas donde estaría más restringida o prohibida su instalación, y las condiciones que deberían cumplir en el resto de zonas los proyectos que se sometiesen a evaluación ambiental, antes del inicio del trámite.
Ecologistas en Acción considera que un buen Plan de Ordenación Regional, incrementaría la seguridad jurídica de los inversores, facilitaría y simplificaría la tramitación de los expedientes, y permitiría la compatibilidad de estas instalaciones con la conservación de los hábitats y valores naturales, potenciando así el necesario desarrollo de un sector clave para la lucha contra el cambio climático.
[1] El Ayuntamiento de Mula, contras las megaplantas. pv magazine. 10/05/2021.